Dos cigüeñas permanecen en el nido de la torre de un tendido eléctrico cercano a la Catedral de Pamplona. EFE/Archivo
La Asociación de Consumidores de Navarra Irache ha denunciado la «inaceptable escalada» en el recibo de la luz tras las últimas subidas y ha señalado que es «necesario» crear un sistema que asegure el suministro eléctrico a los ciudadanos «a un precio asequible y estable».
Ha recordado, en una nota de prensa, que con el encarecimiento del «12,4 % en la factura de agosto, el precio de septiembre puede ser el más elevado desde enero de 2017».
Irache ha indicado que la subida del precio de la energía en el mercado mayorista (ha marcado 74,58 euros MWh, récord del año) afecta, «más pronto o más tarde, a todos los consumidores».
El coste de la energía de los clientes de la tarifa regulada «se ve directamente modificado según esta subasta».
Así, han visto encarecido su recibo «más del 20 % respecto al mismo periodo del año anterior» y el coste anual de una familia, como término medio, se puede situar «en torno a los 730 euros anuales».
Irache ha señalado que también los clientes del mercado libre, aunque ya tienen pactados unos precios, se verán «más pronto o más tarde perjudicados por el encarecimiento del coste al que venden la luz los generadores».
«Es muy posible», ha apuntado, que las comercializadoras encarezcan sus siguientes ofertas, que generalmente pueden modificar anualmente, en función del coste al que se venda la energía en el mercado mayorista.
En lo que va de año se han producido continuas subidas en la tarifa eléctrica, ha dicho Irache, que ha indicado que los responsables «no pueden achacar estos encarecimientos a la sequía, como hacían el año pasado, ya que entre enero y agosto de 2018 la producción hidráulica ha sido un 51 % superior respecto al 2017».
Los encarecimientos «responden más bien a un sistema de la energía opaco y perjudicial para el consumidor», ya que la subasta y la fijación de precios «favorece la especulación y el precio que llega al consumidor final es el más elevado».
Según los últimos datos de Eurostat, ha recordado Irache, España es el sexto país europeo con el precio más caro para los consumidores domésticos, por detrás de Alemania, Dinamarca, Bélgica, Irlanda y Portugal.
Estas oscilaciones, «generalmente hacia arriba», en el precio de la luz y las «diferentes e incluso contradictorias» explicaciones que se dan desde administraciones y empresas implicadas «generan una gran confusión entre los consumidores, que no comprenden por qué sube su factura eléctrica continuamente cuando no cambian sus hábitos de consumo».
El funcionamiento actual del sector eléctrico «no responde a su finalidad», que debería ser ofrecer a los ciudadanos «un bien básico como la luz a un precio asequible», ha apuntado la Asociación de Consumidores.
«Más bien, parece que este entramado favorece más a los intereses de grandes compañías que intervienen en este mercado», ha denunciado.
Irache considera que en un servicio de «primera necesidad» como la luz, es «necesario» que los ciudadanos puedan acceder a él a unos precios «razonables que no supongan un esfuerzo económico notable».
Para ello, ha dicho, es «necesaria y urgente» una reforma estructural que garantice un suministro eléctrico «digno, de buena calidad y a un precio asequible y estable a todos los consumidores».
Junto a ello, ha añadido, «convendría que el nuevo sistema resulte más transparente y comprensible para los ciudadanos».
En cualquier caso, Irache recomienda que los consumidores revisen sus facturas y se asesoren para comprobar que el recibo de la luz «corresponde efectivamente a la tarifa que tienen contratada». EFE
