Dieciséis Estados miembros de la Unión Europea (UE) han aumentado hasta 34.400 el número de refugiados que planean haber reubicado para octubre de 2019, según los últimos avances en la agenda sobre inmigración hechos públicos hoy por la Comisión Europea (CE).
El comisario europeo de Interior, Dimitris Avramópulos, aseguró en rueda de prensa que esos países son España, Finlandia, Eslovenia, Bélgica, Bulgaria, Croacia, Chipre, Francia, Irlanda, Italia, Lituania, Luxemburgo, Rumanía, Portugal, Suecia y el Reino Unido.
Avramópulos indicó que otros Estados pueden sumarse más adelante y algunos revisar las plazas propuestas en las próximas semanas.
En octubre pasado, en una entrevista a Efe, el político griego afirmó que en aquel entonces los socios comunitarios ya habían ofrecido 25.000 plazas, de ellas España 750.
Las cifras aún se encuentran lejos de las 50.000 personas procedentes de África y Oriente Medio que planteaba acoger hasta octubre de 2019 el nuevo esquema de reasentamiento que el Ejecutivo comunitario presentó el pasado septiembre.
De acuerdo con la Comisión, está previsto que el esquema anterior, adoptado en julio de 2015, se complete «con éxito», y los reasentamientos bajo el acuerdo entre la UE y Turquía «continúan a un ritmo constante», de modo que «en torno a 25.700 personas» han sido ya acogidas desde la puesta en marcha de esos planes.
A territorio español habían llegado hasta el viernes pasado 631 personas, de las 1.449 que le corresponden.
La CE confirmó que en la actualidad quedan 750 personas en Grecia y 3.100 en Italia pendientes de ser reubicadas en otros países de la Unión y detalló que alrededor de 31.500 ya han sido acogidas, tras llegar a las costas griegas o italianas, en Estados miembros diferentes.
Hasta el 14 de noviembre, España había acogido desde Grecia e Italia a 1.301 personas, de las 9.323 a las que se había comprometido.
Bruselas subrayó que «casi todos los Estados miembros han respetado sus obligaciones legales», pero señaló que la República Checa, Hungría y Polonia no han tomado aún medidas para abordar las quejas planteadas por la Comisión Europea en el dictamen motivado enviado en julio, el segundo paso en los procedimientos de infracción comunitarios abiertos a esos tres países.
«Estamos saliendo de la crisis gradualmente y ahora estamos gestionando la inmigración con un espíritu de asociación y responsabilidad compartida, dentro y fuera de la UE», indicó Avramópulos en un comunicado.
Ante el nuevo compromiso de los socios comunitarios de reubicar a 34.400 refugiados, el político griego dio la bienvenida al «fuerte compromiso mostrado por los Estados miembros para reducir las rutas irregulares y peligrosas y mejorar los caminos seguros y legales».
Por otro lado, la Comisión Europea aseguró que la Agencia Europea de Fronteras y Costas dará en noviembre «nuevos pasos operativos» para apoyar a los socios a llevar a cabo los retornos.
De hecho, Bruselas calificó los niveles de los regresos de «insatisfactorios» y, por ese motivo, pidió a los Estados miembros recopilar y proporcionar mejor información sobre los retornos para permitir una mejor evaluación sobre su eficacia, además de para conocer dónde puede ser más útil la colaboración de la Agencia Europea de Fronteras y Costas.
En torno a 15.000 inmigrantes han vuelto a sus países de origen a través del denominado «retorno voluntario asistido» y la Comisión espera incrementar la colaboración con los países vecinos de Libia para aumentar esos regresos.
Respecto al acuerdo migratorio entre la UE y Ankara, Bruselas señaló que las autoridades griegas deben «acelerar los esfuerzos» y contar con recursos «adecuados» para garantizar los retornos a Turquía, uno de los puntos clave de ese pacto.
De acuerdo con la CE, solo 1.969 personas han sido llevadas de territorio griego a turco desde marzo de 2016, cuando se dio luz verde al acuerdo.
Además, el Ejecutivo comunitario resaltó que las operaciones Tritón y Sofía de la UE han seguido apoyando para salvar vidas en el mar y detener a los traficantes y contrabandistas.
En ese sentido, indicó que el apoyo de las instituciones comunitarias a Níger ha permitido el procesamiento de 70 casos de contrabando y tráfico, 65 arrestos y 37 encarcelamientos.
Por lo que al Fondo Fiduciario para África se refiere, que contribuye a las labores de búsqueda y rescate en el desierto y ha permitido en 2017 salvar a 1.100 inmigrantes abandonados por traficantes, el Ejecutivo de la Unión instó a los Estados miembros a incrementar su financiación.
