El alto el fuego, sellado entre Gobierno sirio y los rebeldes, ha entrado en vigor este viernes a medianoche
La tregua entre el Ejército sirio y la oposición armada ha comenzado este viernes a medianoche y se mantiene de forma general, a pesar de enfrentamientos puntuales. Los últimos, la misma mañana del viernes, cerca de Damasco.
Tras seis años de guerra, el Gobierno de Bachar al Asad y los grupos armados acordaron este jueves, con la mediación de Rusia y Turquía, un alto el fuego general, del que están excluidos los grupos yihadistas.
Ambas partes deben abrir una ronda de negociaciones que en principio está prevista para finales de enero en la capital kazaja, Astaná. Hasta ahora, las fallidas conversaciones de paz estaban teniendo lugar en Ginebra y eran auspiciadas por Naciones Unidas.
Enfrentamientos y bombardeos cerca de Damasco
El alto el fuego comenzó de manera poco prometedora, con enfrentamientos en las provincias de Deraa y Quneitra (sur) y en Hama, aunque no se informó de víctimas. Fuentes rebeldes citadas por Reuters han asegurado también que las fuerzas aéreas bombardearon las aldeas de Atshan y Skeik, en la provincia de Idlib.
Ya por la mañana, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH, una ONG con sede en Londres) y fuentes rebeldes han asegurado que se están produciendo combates en las cercanías de Damasco, y que las tropas gubernamentales están usando helicópteros.
Los grupos yihadistas, fuera del acuerdo
A pesar de que la tregua ha sido aceptada por la Comandancia General del Ejército y las Fuerzas Armadas de Siria y por la mayoría de las facciones rebeldes, los grupos yihadistas que operan en la guerra civil están excluidos. Tanto Rusia como Turquía han dejado claro que el Estado Islámico no tiene ninguna relación con el alto el fuego, pero existen diferencias sobre la inclusión de otras organizaciones como el Frente de la Conquista del Levante (antiguo Frente al Nusra, exfilial siria de Al Qaeda).
Para las autoridades sirias, la Conquista del Levante, que en varias partes del país lucha junto a otras facciones rebeldes, está excluida del pacto. Sin embargo, para la oposición armada, todo territorio en el que ellas están presentes queda enmarcado en el cese de hostilidades.
Horas antes del comienzo del cese de las hostilidades, el ministro sirio de Asuntos Exteriores, Walid al Mualem, ha explicado en una entrevista a la televisión estatal que el acuerdo es «una oportunidad real de alcanzar una solución política al conflicto» en su país. Al Mualem ha insistido en que esta oportunidad puede «poner fin al derramamiento de sangre en Siria y encontrar un futuro para el país» aunque ha especificado que el ejército sirio seguirá luchado contra el Estado Islámico y el Frente de la Conquista del Levante porque, ha asegurado, están fuera del acuerdo. NAVARRA INFORMACIÓN
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