Por las declaraciones del PSOE y del de Ciudadanos, no parece que la gobernabilidad de este país vaya a ser fácil, por lo menos de momento.
El hecho de que ahora sí, el lider del PP, vaya a aceptar someterse a un proceso de investidura, parece haber soliviantado a aquellos partidos que pudieran favorecer, con su abstención, la llegada de Rajoy de nuevo a la presidencia del gobierno.
No obstante, el fantasma de unas terceras elecciones parece sobrevolar unas conversaciones que en momentos parecen llegar a nada.
En este ámbito, sorprende el mandato de los tribunales austriacos de repetición de las elecciones. Sorprende, porque sería algo extraordinario y pocas veces visto.
Curiosamente, coincide esta situación con la de aquí, en España, cuando algunas voces de los podemitas sugieren que hubiera habido «pucherazo» electoral la noche del 26j.
Mientras tanto en Europa parece que fuera contagiándose, cual fichas de dominó, que la Unión Europea debe ser de todo menos unida, como así afirman países como la república eslovaca, que llega este semestre a ostentar la presidencia de la Unión, o países como Polonia o Hungría.
