El presidente estadounidense Barack Obama aprovechó para poner en cuestión de nuevo la venta de armas con insuficientes controles. Obama se preguntó por que en otros países no ocurren masacres semejantes: “No sabemos todos los hechos, pero lo que sí sabemos es que una vez más murió gente inocente y en parte fue así porque alguien que quería causar daño no tuvo problemas para conseguir tener un arma en sus manos.”
El ataque ocurrió el miércoles por la noche en la Iglesia Africana Metodista Episcopal Emanuel, una de las congregaciones negras más antiguas del país mientras un grupo de fieles participaban en una lectura de textos de la Bíblia.