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Concluye el Congreso del Opus Dei con 274 congresistas para adaptar el «motu proprio» del Papa Francisco
Desde el pasado 12 de abril hasta ayer domingo 16 de abril 274 fieles del Opus Dei se han reunido en Roma con Mons. Fernando Ocáriz y sus vicarios para adaptar los estatutos de la prelatura al motu proprio “Ad charisma tuendum”.
Por tanto, un Congreso general de carácter extraordinario tal y como consideró el Prelado del Opus Dei en el que han participado 126 mujeres y 148 hombres. En 1925 se celebrará el Congreso Ordinario, tal y como corresponde.
El motu proprio Ad charisma tuendum (14-VII-2022) modificó dos artículos de la Constitución Apostólica Ut Sit, con que se erigió la prelatura en 1982, para adaptarlos a la normativa fijada por la reciente Constitución Apostólica Praedicate Evangelium (19-III-2022) sobre la Curia romana.
Los trabajos y conclusiones de estos días se presentarán posteriormente al Dicasterio para el Clero, el ente de la Santa Sede con competencias sobre las prelaturas personales. Más adelante, la Santa Sede comunicará las modificaciones finales a los estatutos aprobadas por el Papa, que es el legislador en la materia.
En la homilía de comienzo del Congreso, el Prelado, comentando el Evangelio de la Misa, se refirió al deseo de los discípulos de Emaús de que el Señor se quedara con ellos. Esa misma petición la hacía Mons. Ocáriz para que el Señor guiase con su gracia el trabajo del Congreso.
Carta a los fieles
El Prelado del Opus Dei también se ha dirigido en su tradicional carta a los fieles de la Obra. En ella ha agradecido la Oración elevada al Espíritu Santo para pedir «su ayuda» en el Congreso.
Del Congreso ha destacado el «ambiente de serenidad y también de buen humor y la activa participación de todos y todas«. «Cada uno se ha podido manifestar con total libertad, tanto en los grupos de trabajo como en las sesiones plenarias».
Ha explicado a «sus hijos e hijas» el desarrollo de esta celebración. En la que «hemos constatado una vez más los lazos de filiación y de fraternidad que nos unen, así como el amor a la Iglesia y al Santo Padre». Ha destacado «tantas iniciativas de evangelización y servicio a muchas almas en todo el mundo».
«Al confluir en Roma personas de tantos países, ha sido también natural tener muy presente todo el Opus Dei, a todos los cooperadores y amigos, rezar los unos por los otros y, especialmente, por los que vivís en naciones azotadas por la guerra, o por las distintas formas de pobreza y necesidad», ha añadido en su misiva.
Ha recordado, así mismo, que «las sugerencias que no eran aplicables a lo que ahora pedía la Santa Sede se podrán estudiar durante las próximas Semanas de trabajo y como preparación del próximo Congreso general ordinario, que se celebrará en 2025«.
«Durante los días pasados, vuestras hermanas y hermanos congresistas han podido trabajar a fondo sobre las sugerencias llegadas de todas las regiones y va quedando perfilada una propuesta de ajustes a los Estatutos que responde a la petición del Papa en el motu proprio Ad charisma tuendum, y que será entregada en los próximos meses a la Santa Sede», ha explicado.
A todos «nos han guiado – ha dicho el Prelado- dos criterios fundamentales: la fidelidad al carisma que recibió san Josemaría el 2 de octubre de 1928 y la filial adhesión a la voluntad expresada por el Santo Padre». «Se ha procurado expresar con más claridad la dimensión carismática de la Obra».
«Ha sido una manifestación elocuente de unidad en torno al “don del Espíritu recibido por san Josemaría” (Ad charisma tuendum, preámbulo)», ha concluido. en su carta.








