El mexicano Sergio Flores cortó dos orejas y otras tantas las perdió por la espada, en la corrida de feria de San Juan del Río, en el central estado de Querétaro, en un festejo que alternó con sus paisanos Fabián Barba y Diego Silveti, que se fueron de vacío.
Con media entrada se lidiaron siete toros, uno de regalo, del hierro de La Venta del Refugio, bien presentados y desiguales en su comportamiento, destacando los toros tercero y sexto, este premiado con arrastre lento.
Barba, con el primero estuvo con deseos y fue aplaudido, como también lo logró con el cuarto. Regaló un séptimo con ovación final, pero sin trofeos.
Silveti, que reapareció después de su percance en abril en Aguascaliente, le tocó un mal lote, y aunque estuvo dispuesto, sólo obtuvo silencio y palmas.
Flores, lo ha sido todo en esta corrida, cuajó al tercero, realizando una faena muy torera y con firmeza. Mató de una estocada y fue premiado con dos orejas. Estuvo mejor en el sexto, con más calidad, pero la espada lo traicionó y todo quedó en una ovación. Salió a hombros.
