Los comienzos de la vida del Sol son un misterio, pero ahora investigadores han logrado algunas confirmaciones de sus hipótesis al analizar pequeños cristales de hibonita, que apuntan a que la niñez del astro rey fue “muy movida”.
El Sol se formó hace unos 4.600 millones de años, unos 50 millones años antes que la Tierra, por lo que es difícil encontrar objetos de contengan material procedente de sus primeras etapas.
Sin embargo, un equipo de expertos ha analizado antiguos cristales azules atrapados en meteoritos que revelan cómo era la estrella, que aparentemente tuvo “unos inicios muy agitados”.
Aunque no hay nada en el Sistema Solar lo suficientemente viejo como para confirman cómo era realmente el Sol, expertos de la Universidad de Chicago (EE.UU.) han analizado minerales procedentes de meteoritos, que se conservan en el Museo Field de Historia Natural, que probablemente son los primeros que se formaron en el sistema Solar.
El Sol se formó hace unos 4.600 millones de años, unos 50 millones años antes que la Tierra, por lo que es difícil encontrar objetos de contengan material procedente de sus primeras etapas.
Sin embargo, un equipo de expertos ha analizado antiguos cristales azules atrapados en meteoritos que revelan cómo era la estrella, que aparentemente tuvo “unos inicios muy agitados”.
Aunque no hay nada en el Sistema Solar lo suficientemente viejo como para confirman cómo era realmente el Sol, expertos de la Universidad de Chicago (EE.UU.) han analizado minerales procedentes de meteoritos, que se conservan en el Museo Field de Historia Natural, que probablemente son los primeros que se formaron en el sistema Solar. EFE