Manolo Royo
Artículo 95
Mire usted, busca ruedas para recauchutar zapatos “pisa-mierdas” (cosa tan digna como cualquier buscador), deje de enfadarse con la historia porque la desconoce y además, no participó de ella.
Tiene usted razón al insinuar que nos trajimos el oro a España, sí, pero casi a mediados del siglo pasado lo devolvimos a Rusia. ¿Que nos confundimos de país? No le digo que no, pero aquí no está el oro.
Relativo a los muertos de una y otra parte, pues no le sabría decir, desde luego sus gentes estaban algo menos civilizadas que las nuestras, de lo contrario hubieran llegado ustedes antes aquí.
De usted gracias a quien tenga costumbre de hacerlo de no haber sido conquistado por los ingleses y de que su zona la conquistáramos los españoles, que dejábamos un par de jesuitas y un retén de soldados para evitar que siguieran sacrificando nativos para complacer a sus dioses.
Con los ingleses la cosa hubiera cambiado. ¡Esos sí que conquistaban bien! ¡Sin testigos! Ponían a los nativos en fila y con una sola bala de mosquete se cargaban a toda una familia. Bueno, ya podrá usted observar la cantidad de nativos que quedan por los EEUU.
Los franceses también conquistaban lo suyo, pero sin champagne, como los holandeses, sin mantequilla. Incluso hay islas que las comparten franceses y holandeses a día de hoy. Todos ellos, como digo, aún tienen tierras por su continente. Desde entonces las gobiernan en propiedad porque parece que no eran de nadie. A nosotros parece que solo nos quedan los “toca-huevos”.
Quiero aprovechar la ocasión para agradecerle a usted, y sobre todo, a los que acogieron a los exiliados españoles durante nuestra contienda, porque sin su ayuda y cariño hubiera sido del todo mucho peor.
Lo nuestro fue un accidente, recuerde que marchamos a por especias y nos encontramos con un Continente. Por cierto, los españoles hemos sido “conquistados” varias veces. Venían los Romanos y nos conquistaban. Los árabes, por ejemplo, estuvieron por aquí más de 800 años… ¡Eh! Y agradecidos, porque dimos un salto importante, de medio primates llegamos a tener un Imperio y nos pusimos a viajar.
Deje usted tranquilo a los reyes porque sino, no podrán jugar a la baraja.
A usted, mi querido prócer, le falta un hervor cultural, está usted demostrando con sus declaraciones que está en primero de indígena.
Manolo Royo, humorista www.manolo-royo.com
