NÚMERO 2
El 30 de mayo de 1982 España se convertía en el miembro nº 16 de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte).
La OTAN es una alianza militar. El objetivo para el que se creó fue el defender a cualquier país que fuese atacado por una potencia externa a la propia organización.
Su principal impulsor fue EEUU como una manera de contrarrestar la potencia militar que la URSS tenía en aquel entonces, año 1949, en los comienzos de la Guerra Fría. La Guerra fría pudiera definirse como el periodo de la historia, acontecido después de la II guerra mundial, donde no había guerra, pero tampoco había paz y, donde, EEUU y la URSS eran las dos superpotencias mundiales.
Fue en 1981, con el gobierno del centrista Leopoldo Calvo Sotelo, de la UCD (Unión de Centro Democrático), cuando España solicitaba su adhesión a esta organización. Casi simultáneamente el entonces llamado Consejo Atlántico Europeo (CAN) invitaba formalmente a España a incorporarse a dicha alianza militar.
El 5 de junio de ese mismo año, 1982, en una ceremonia realizada en la sede que la OTAN tenía en Bruselas y con la participación por parte española por el entonces ministro de asuntos exteriores José Pedro Pérez Llorca se producía el ingreso de España en la OTAN.
Sus palabras, nada más firmado el acuerdo, fueron las siguientes:
«nadie nos empujó a ella y actuamos teniendo en cuenta exclusivamente el interés nacional, aunque entiendo que otros conciban el servicio a ese interés de forma distinta».
Palabras proféticas y que meses después tras el triunfo del partido socialista de Felipe González (1982) se harían realidad, al paralizar durante un tiempo el gobierno socialista salido de las urnas, la incorporación plena (militar) en la estructura de la OTAN.
Andrés Valencia, profesor e historiador