Parece que la paciencia del principal partido de la oposición en este país, el Partido Popular de Pablo Casado, se ha agotado.
De ahí las declaraciones de que el PP no apoyará el decreto del Gobierno sobre Justicia, medidas judiciales impuestas por el gobierno en este confinamiento. Y es que las actuaciones de este gobierno, acaban con la paciencia del más pintado.
Pretender imponer un Estado totalitario, un Estado comunista, en el que el gobierno lo controla todo, es algo impensable en un país democrático. Y aprovecharse de un estado de alarma por un coronavirus, más.
La excusa de apoyar a un gobierno porque se está en una situación de máxima urgencia, se diluye, cuando precisamente el gobierno que pide apoyo, se dedica un día sí y otro también a romper puentes con aquellos que pueden realmente apoyarle sin pedir nada a cambio.
Es el gobierno quien tiene que tender puentes no dedicarse a romperlos, pero ya sabemos que este gobierno es especial… de malo y nefasto.