Nieves Ciprés
Ayer se volvían a cruzar más líneas rojas. El partido socialista catalán afirmaba que Cataluña es una nación y España un estado plurinacional. Y, aquí en Navarra, PSN junto a Geroa Bai, Bildu, Podemos e I-E, pedía poner fin a la dispersión de los presos etarras. Ver para creer. Un PSN que está sirviendo de lanzadera y ejemplo para España.
Y todavía más, excusándose en los Presupuestos, Chivite intenta meter en el mismo saco a Navarra Suma y a Bildu, el de los “amigos” que homenajean a ETA. Un Bildu que no rechazará ni los presupuestos de quien fue investida gracias a su necesaria abstención, ni los millones de euros que se destinen a la nueva política identitaria de Chivite, la nacionalista y de «euskera». La de ellos.
Y de Justicia va la cosa, pasadas las elecciones del 10 de noviembre, se daba a conocer la macrosentencia del PSOE en Andalucía.
Varios cientos de millones, destinados a los trabajadores, malgastados por quienes se han erigido defensores de los “obreros”. «Transferencias de financiación en las distintas modificaciones presupuestarias»; gastos en prostitución, cocaína y restaurantes de lujo, según declaró, ante la juez Alaya, el propio chófer del exconsejero andaluz Guerrero, Juan Francisco Trujillo, que se gastaban entre 20.000 y 25.000 euros en cocaína.
Una vergüenza. EREs, Gürthel, Filesa-Matesa … Porque no solo es corrupción, es ROBAR, robar sirviéndose de cargos políticos y de la política. Pero más pecado, si cabe, tiene el que roba el dinero público, el de todos los españoles que pagan religiosamente los impuestos, como es el caso de Andalucía.
Y a pesar del escándalo de los EREs andaluces, el PSOE y Podemos, quienes tanto criticaban la corrupción en el PP (y eso que era dinero privado), continúan en esa especie de «luna de miel» incorporando a los separatistas de izquierda republicana de Cataluña.
Si Iglesias pasa por alto el escándalo, Sanchez no ha dicho nada al respecto. ”El que calla otorga”. Es decir, aprueba.
Pero sí han hablado los que defienden el “dialogo” con Cataluña, un diálogo que no cabe con quienes quieren la secesión de un ente nacional, a cualquier precio, con violencia o sin ella, y el plurinacionalismo, cuando sólo en un Imperio hay naciones y España ya no lo es.
No contentos con esto, va el PSOE, Podemos y ERC y llevan el acuerdo de Gobierno a consulta de sus afiliados, no a nuevas elecciones o referéndum. No, no, no… De sus afiliados. Y ¡anda! ¡sorpresa! Sus afiliados respectivos lo aprueban. Gobernar como sea. Que las migajas…llegar, llegan.
Los recuerdos de aquel llamado Frente Popular entre socialistas, comunistas y separatistas, que antecedió a la Guerra Civil del 36, resuenan en la mente de la izquierda.
Y dentro de los avatares políticos de desgobierno y destrucción, la defensa de lo indefendible. Las delegaciones que el PSOE, tiene en Cataluña y en Navarra prefieren alinearse con quienes humillan constantemente a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, sin respuesta alguna por parte del partido federal. Cuando el propio Sindicato Unificado de Policía (SUP) acusaba este miércoles a los socialistas catalanes y navarros de humillar al Cuerpo al apoyar iniciativas, sustentadas por los independentistas, que cuestionan el trabajo de los agentes o que piden la salida de sus dependencias”.
Son los partidos de corte independentista los que no quieren tener a la Guardia Civil y a la Policía Nacional. Parece que se aprovechan de la debilidad del socialismo para conseguir sus propósitos, aunque bien mirado, hay consentimiento por parte del PSOE del que, últimamente, poco se espera. Si hay que claudicar ante las órdenes nacionalistas, pues se claudica.
Lejos queda la defensa socialista a las víctimas de la violencia y asesinatos de ETA o del independentismo.
Así va este país. Todo menos solucionar los problemas de sus ciudadanos. Pero poltronas, sillones y cobrar por no trabajar, ni gobernar, eso sí.
Nieves Ciprés, periodista
