Una vez más, y ya van unas cuantas, Bildu ejerce de árbitro en nombramientos de cargos públicos navarros.
Hace unos días en la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona donde Bildu presenta un «independiente», PSN lo apoya y retira candidatura. Ayer en la Federación Navarra de Municipios y Concejos donde el cambio de voto de los bildus y compañía, sin retirar candidatura, despejaban el camino para que un candidato de Unión Peraltesa de Izquierdas -o de cercano a PSN- consiguiera alzarse con el puesto.
Y una vez más el PSN aceptando los votos del nacionalismo vasco, el de las pistolas, sin rubor alguno para cumplir lo acordado para la investidura y conformación de Gobierno.
¿Cuántas veces va a volver pasar esto? Pues muy sencillo. Mientras Bildu vea que puede someter a sus dictados a un izquierda deseosa de poltronas, Bildu seguirá votando a lo que le conviene.
Humillación tras humillación, el PSN continua. No importa, vivan las poltronas.