Hace pocos días el recién nombrado consejero de Educación navarro declaraba que si bien él quiere implantar Skolae en todos los centros educativos navarros, tanto públicos, privados como concertados las cosas hay que hablarlas y dar tiempo a los actores implicados.
Ayer Bildu, el que se abstuvo para que Chivite presidiera el Gobierno de Navarra (PSN, Geroa Bai, Podemos con apoyo de I-E), alertaba y criticaba a su Gobierno, mostrando la extrañeza que le supone que no se halla implantado Skolae durante este curso.
Bildu sabe que de la noche a la mañana no se puede implantar un programa de dichas características y, además, con las críticas que está teniendo. Sabe también Bildu, que si quiere mostrar su control y dominio sobre el actual Gobierno navarro, tiene que atacarlo y criticarlo sin importarle lo que diga.
Difícil papeleta la de un Gobierno, que socialista/nacionalista navarro, que se ve como está a merced de sus socios necesarios, imprescindibles e insustituibles. Si no es Skolae o la elección del Senador Autonómico (candidato de Podemos o Geroa Bai), será otra cosa, y así sucesivamente, el caso es poner «los puntos sobre las ies» a este gobierno.
Y esto a un mes de la toma de posesión de la presidenta y el engrosado gobierno a 13 consejerías sumando los nombramientos de puestos que está recabando.