Tras el acuerdo del partido socialista con los independentistas vascos, Podemos e I-E, parece que Navarra va a ser la moneda de cambio para que gobierne el también socialista Sánchez.
Y es que el autogobierno navarro parece importar muy poco a Sánchez. No importa que desaparezca, un problema menos, estará pensando Sánchez, a la vez que quitamos el fuero navarro. Un anacronismo que es hora que desaparezca. Podemos seguir gobernando.
Visto lo visto, al socialismo poco le ha importado y le importa Navarra. Aliarse con quienes quieren destruirla es buena muestra de ello. Con un programa alejado y que obvia todo lo identitario, aquello que tanto criticaba y denunciaba la propia socialista, María Chivite, durante estos cuatro años de gobierno nacionalista en la Comunidad Foral.
La manida excusa de un gobierno progresista no se sostiene. ¿El PNV (Geroa Bai) o Bildu son progresistas? ¿Es progresismo impedir el TAV, es progresismo ir en contra del Canal de Navarra, por ejemplo?
Menos engaños y más realidades. Este pacto no ha sido la voluntad de los navarros.
¿Y cual ha sido la voluntad de los madrilenos, los murcanos o los castellanoleoneses?