Sede del PSN en Pamplona. NAVARRAINFORMACIÓN.ES
Desde que se produjeron los resultados electorales en Navarra, un número indeterminado de ciudadanos pedía con insistencia la celebración de una manifestación para protestar frente al pretendido acuerdo entre el PSN, que quedó en segundo lugar en las elecciones, Geroa Bai, Bildu, Podemos e IU, terceros, cuartos y quintos, para volver a instaurar el nacionalismo vasco en el Gobierno de Navarra.
La cosa no prosperó ya que había unas negociaciones por medio y podía interpretarse mal. El hecho es que pasaron los días y llegó el temido día en el que se hacía efectivo el pacto entre todas esas fuerzas políticas y he aquí que el PSN, sin rubor alguno, daba la presidencia a Geroa Bai y puestos de responsabilidad en la Mesa del parlamento navarro, ¿A quién? a Bildu, marcando con ello que existían posibilidades para un nuevo gobierno nacionalista en Navarra, esta vez, propiciado por quien había abjurado de los nacionalismos, el PSN.
De nuevo una convocatoria por redes sociales, esta vez para protestar, delante de la sede general del PSN en Navarra, ante lo sucedido y de nuevo a iniciativa de los ciudadanos. Iniciativa que poco después la protagonizarían dos asociaciones navarras.
Pero ahora, una novedad, el candidato de Navarra Suma (UPN, PP y Ciudadanos) a la presidencia del Gobierno foral, Javier Esparza, afirmó este viernes que la plataforma se desmarcaba y no compartía una protesta frente a la sede del PSN, a pesar de conocer que la convocatoria tiene la autorización de la delegación del gobierno y es obvio que no se trata de un escrache.
El ciudadano preguntándose porqué. Presumiblemente, para no romper lazos con el PSN, por si hubiera cambio de rumbo o quizá porque, a pesar del inestable escenario político, un movimiento de última hora no de vía libre a la investidura de la candidata socialista con la abstención de los que pisotean la dignidad de las víctimas de ETA y cuya miseria moral les llevó a justificar, si no aplaudir, la existencia de la banda terrorista.
