El hundimiento del PSOE, que ha perdido 14 escaños y se ha quedado por debajo de la barrera del 30 % de los votos por primera vez desde 1982 en unas elecciones autonómicas, abre un nuevo escenario en Andalucía que podría desembocar en un cambio de ciclo político tras 37 años de gobierno.
La irrupción de Vox en el Parlamento andaluz con unos sorprendentes doce diputados, junto al desmoronamiento del PSOE, podrían provocar la salida de los socialistas del Gobierno andaluz si el PP, Ciudadanos y Vox llegan a un acuerdo.