Últimas noticias

«Historia portátil de la fotografía», la mirada de una coleccionista obsesiva

«Historia portátil de la fotografía», la mirada de una coleccionista obsesiva

Lola Garrido comenzó a comprar fotografías a mediados de los 80 y como resultado de lo que ella define como un «trastorno obsesivo-compulsivo» logró reunir una colección con imágenes de los grandes autores del siglo XX, parte de la cual se expone a partir de mañana en la sala Artegunea de San Sebastián.

En esta muestra, «Historia portátil de la fotografía», que se podrá visitar hasta el 17 de febrero, están casi todos los nombres importantes, 77 en total, de Berenice Abbott y Dorothea Lange a Cecil Beaton, Robert Capa, Henri Cartier-Bresson, William Klein, René Magritte, Robert Mapplethorpe, Irving Penn, Man Ray y Robert Doisneau.

Existen «huecos» que la coleccionista no pudo rellenar, fundamentalmente por los altos precios de algunas obras, ha explicado la propia Garrido, que precisamente puso fin a sus adquisiciones hace unos años por el elevado valor que la fotografía había alcanzado en el mercado del arte.

Y todo ello después de no haberse frenado cuando le dijeron que estaba «loca» por vender, para seguir alimentando la colección, dos apartamentos que tenía en San Sebastián, la ciudad de esta donostiarra nacida en Alsasua (Navarra), que trabajó en el Zinemaldia, fue directora artística de la Fundación FotoColectania y ha comisariado diversas exposiciones.

Hoy, en Artegunea, la sala que la Kutxa tiene en el centro internacional de arte contemporáneo Tabakalera, ha hablado de su «primer amor», un retrato masculino en blanco y negro con mucho grano con el que inauguró la colección, firmado por el húngaro André Kertész, que es la obra que más le gusta por su composición «muy pensada».

Esa instantánea se puede contemplar en San Sebastián, donde las imágenes se han dispuesto por un orden estético, no cronológico, y donde quedan patentes algunos de los temas recurrentes de Garrido en su personal mirada a la historia de la fotografía, como la moda, la mujer y las vanguardias.

Posee la serie completa de «Women Are Beautiful», de Garry Winogrand -en Artegunea solo se exhibe una fotografía-, en la que se ve el cambio de actitud de las mujeres en la machista década de los 60 y que la coleccionista considera el inicio del «Me Too».

De Dorothea Lange se puede ver su famosísima «Migrant Mother», que llevó a Lola Garrido a indagar sobre el después de esa mujer fotografiada junto a sus hijos, quien se había quejado de que no le habían pagado y de que la autora ni siquiera le preguntó cómo se llamaba.

«Lange, que para mí fue la mujer que mejor supo ver la Gran Depresión americana, cometió un error, y yo he tratado de enmendarle la plana -ironiza la coleccionista-. Esa señora se llamaba Florence Owens, salió adelante, tuvo una vida muy buena y unos hijos estupendos», añade sobre esa madre inmigrante captada por la cámara de Lange en California en 1936.

Se muestra asimismo otra de las grandes imágenes icónicas de la historia de la fotografía, «Muerte de un miliciano», que Robert Capa realizó en 1937 durante la contienda civil española y que, como a muchos otros, a Garrido «casi» le consta que es falsa.

No parece importarle haber pagado en una subasta de Sotheby’s por esta imagen, tras la que ella observa la «inteligencia» del fotógrafo húngaro, porque, manipulada o no, consiguió que el mundo viera «lo terrible de esa guerra infame».

Y entre las muchas mujeres que le han interesado están también actrices como Marlene Dietrich y Marilyn Monroe. De ésta última se han seleccionado cinco retratos, tomados de 1952 a 1962 y que firman cinco autores diferentes: Philippe Haslman, Marti Cole, Inge Morath, Ed Feingersh y Bert Stern.

Bodegones, paisajes urbanos, fotografías documentales y científicas son parte también de esta exposición, cuyo corpus central lo constituyen obras realizadas desde los años 20 a los 60, entre las que se incluye el fotomontaje «Io+gatto» de Wanda Wulz, de 1932, aunque también se acerca a la última década del siglo XX, como en una paisaje madrileño de 1992 de Gabriele Basilico.

Instantáneas de Rodchenko, Norman Parkinson, Diane Arbus, Madame Yevondé, Jürgen Klauke, Hans Kilian y Madame D’Ora son otros nombres de la colección de Laura Garrido. Algunas obras que adquirió han dejado de interesarle y otras que consideró más «difíciles» ahora le gustan más.

No sabe cuál fue la última que compró, ni cuándo. «Posiblemente fue un malentendido, porque no me acuerdo», ha dicho esta mujer, comisaria también de esta exposición que ha pasado por el Museo Pushkin de Moscú y por ciudades como Niza (Francia). En España, se ha mostrado únicamente una parte en Valladolid.

Ane Abalde, directora de la sala, y Anne Morin, directora de diChroma Photography, han participado también en la presentación de la muestra junto a Garrido, autora además del libro «La trilateral del gusto», sobre arte, inversión y mercado. EFE

About The Author

Otras noticias publicadas

Responder

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies