Enrique Maya, portavoz de UPN en el Ayuntamiento de Pamplona. Navarrainformacion.es
El portavoz de UPN en el Ayuntamiento de Pamplona, Enrique Maya, considera que «la crisis abierta en el cuatripartito de Asiron es el inicio del fin de un experimento terriblemente nocivo para Pamplona».
«El tiempo nos ha dado la razón» sostiene el regionalista en un comunicado en alusión a la decisión del alcalde de expulsar del equipo de gobierno a Aranzadi e I-E.
Al respecto añade que el propio alcalde ha confirmado que estaban en lo cierto cuando hablaban del «desmadre y la parálisis que ha existido en el cuatripartito durante estos tres años». En este sentido comenta que ha reconocido durante la rueda de prensa que «las frecuentísimas disensiones han sido un freno».
Maya subraya que en estos tres años de triste legislatura para Pamplona han visto «cómo el único proyecto común de las cuatro formaciones era echar a UPN de la alcaldía» y «cuando tu único proyecto es ir contra la mitad de los ciudadanos y sólo eres capaz de lograr acuerdos con tejemanejes de despacho y mercadeando con las partidas presupuestarias para saciar los egos de cada sigla política, lo lógico es acabar explotando».
Tras indicar que «lo ocurrido no es ninguna sorpresa, porque los cuatro partidos estaban deseando romper, por pura estrategia política y sin preocuparles para nada la gobernabilidad y el futuro de Pamplona», remarca que «a partir de hoy, Pamplona tiene un gobierno única y exclusivamente nacionalista vasco, aunque los resultados de su política no pueden ser más radicales que los vividos hasta ahora con la total complicidad de IE y Aranzadi».
Maya, quien lamenta que «Pamplona y los pamploneses son los verdaderos paganos de la situación», recalca que «la responsabilidad del rechazo al proyecto de las inversiones financieramente sostenibles que ayer votó el pleno es de un alcalde que sólo habló del expediente con los cinco concejales de Geroa Bai y que no trató siquiera de acordarlo con el resto de sus socios y mucho menos con los concejales de la oposición».
«Cada día que pasa, Asiron se encuentra más aislado y atrincherado en las posiciones ideológicas de Sortu, impuestas por Perales y Abaurrea, como se pudo observar durante los debates de ayer», opina el regionalista que apunta que en este momento, el gobierno municipal de Bildu y Geroa Bai tiene los mismos concejales que UPN, por lo que ha exigido que «abandonen sus políticas identitarias y de confrontación». EFE
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