El pedagogo, filósofo y escritor navarro, Gregorio Luri. adolescentesymas.com
El pedagogo Gregorio Luri, autor de varios libros sobre educación, ha instado a analizar los errores de los alumnos para aprender sobre los estudiantes, sobre los profesores y sobre el propio sistema educativo, que a su juicio se centra en los aciertos pero no presta atención a las equivocaciones.
Luri, que mañana imparte el seminario «El error del alumno como ‘felix culpa'» en el Instituto Cultura y Sociedad de la Universidad de Navarra, denomina a su propuesta la «Errorología».
En España «hay un cierto pánico al ridículo y eso no habla demasiado bien de nosotros mismos», ha comentado a Efe el profesor navarro, que acaba de publicar el libro «El deber moral de ser inteligente» (Plataforma Editorial).
El pedagogo, que es profesor de Filosofía y es licenciado en Ciencias de la Educación, ha señalado que en España hay «cursillos sobre cómo hacerlo bien, cómo triunfar, cómo conseguir que nuestros alumnos hagan maravillas en tal o cual cosa», pero «cuando pretendemos hacer las cosas muy bien, no prestamos suficiente atención a los problemas concretos de nuestros alumnos».
«Yo parto de la tesis de que un alumno, cuando se equivoca, no es que se haya levantado dispuesto a encolerizar al profesor, sino que él cree que está dando la respuesta correcta a la pregunta que se ha hecho a sí mismo», ha afirmado.
A partir de ahí, Luri comenzó a recopilar exámenes, respuestas y errores de los alumnos para analizarlos, porque «alguien tiene que hacer explícita la lógica subyacente del error, cuál es el proceso lógico mediante el cuál desde unas premisas se ha llegado a esa conclusión».
De su análisis, llegó a la conclusión de que «lo importante no es que alguien vaya desde fuera de un centro a decirles a los profesores cuáles son los errores de los alumnos», sino que los propios docentes «se den cuenta de la importancia de analizar esto y que ellos mismos desarrollen sus estrategias para analizarlos y clasificarlos».
Por ello, ha considerado que todo centro debería una especie de «clasificación» de los errores de sus alumnos, porque «algunos son de carácter psicológico, de problemas de aprendizaje del niño, otros son de mal aprendizaje, en el que puede tener incidencia la familia, el medio y también la escuela, y otros son vicios o hábitos que se van adquiriendo».
«Creo que la consideración del error del alumno es un recurso esencial para pensar en las propias prácticas», ha apuntado Luri, que ha destacado que «a veces te das cuenta, analizando la respuesta del alumno, que es la pregunta la que está mal formulada, porque hacer preguntas no es nada fácil, es algo que forma parte de un proceso complejo».
Respecto a la «felix culpa» (culpa feliz), ha explicado que se trata de una expresión que aparece «en el manual pedagógico de más éxito de la historia de la humanidad», la «Ratio Studiorum» (Plan de estudios) de los jesuitas.
Esa expresión, «viene a decir que el alumno que se equivoca en clase en realidad no se ha equivocado, sino que está cometiendo una ‘culpa feliz’, porque tiene al maestro al lado para corregir ese error y convertir la equivocación en una oportunidad de aprendizaje».
Luri, nacido en Azagra, ha recibido varios premios, entre ellos el Juan Gil-Albert de ensayo y el Premio Mejora tu Escuela Pública.
Ha publicado dos docenas de libros de historia, filosofía y pedagogía y también ha prologado o epilogado a diversos autores, entre ellos a Rita Levi-Montalcini en «Tu futuro» (Plataforma Editorial, 2017). EFE
