Arrimadas crítica que, aunque «en suspenso», sigue siendo una «una declaración de independencia»
La líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, ha advertido de que la independencia «a plazos» o «en diferido» como la que, ha dicho, ha proclamado hoy el presidente catalán, Carles Puigdemont, sigue siendo una «declaración de independencia» y un «golpe a la democracia».
Arrimadas ha afirmado, mostrando un corazón con la bandera de Cataluña, España y Europa se ha dirigido a Puigdemont «no vamos a permitir que rompa nuestro corazón a pedazos», así mismo en clara referencia a las fronteras y economía lastrada en Cataluña, ha dejado claro que «no va a permitir» que pidan a su familia, que vive en Andalucía, el pasaporte cuando vayan a verla.
La líder de Ciudadanos (C’s) en Cataluña, Inés Arrimadas, ha acusado a Carles Puigdemont, de promover un “golpe contra España y la Unión Europea” tras la declaración del presidente de la Generalidad que declaraba la independencia de Cataluña, pero dejándola “en suspenso” y apelando al diálogo “con el Estado español”.
«Esto ha sido una crónica de un golpe anunciado a España y la Unión Europea», ha dicho Arrimadas en su intervención en el Parlament. «Con el 1-O usted ha encontrado la coartada: Sea en diferido o suspendida sigue siendo una declaración de independencia”, ha añadido.
Arrimadas ha centrado su intervención en subrayar el «nulo apoyo» que la independencia de Cataluña tiene en Europa. «Nadie en Europa apoya lo que usted, Carles Puigdemont, acaba de hacer. Nadie reconoce el 1 de octubre. Todo el mundo ha visto que esto no iba de urnas sino de independencia», ha criticado.
La diputada ha dicho que los partidos independentistas «se han equivocado de siglo y de lugar» y ha señalado que el nacionalismo catalán representa «el peor nacionalismo que hay en Europa».
La portavoz de Ciudadanos ha finalizado su discurso blandiendo su pasaporte: «No pienso permitir que pidan a mi familia que vive en Andalucía el pasaporte cuando vengan a verme. Su proyecto significa la salida de la Unión Europea».
Se pide mucho diálogo, pero falta la gran pregunta, ¿Diálogo sobre qué? ¿Sobre la partición de España? ¿Sobre seguir priorizando la economía catalana sobre la del resto de España? ¿Sobre consumar actitudes que hace tiempo que se tenían que haber cortado de raíz? Veo muy bien que se defienda el diálogo, pero vamos a ver sobre qué se quiere dialogar, porque por lo que se ha podido ver el tema monográfico es la creación de la República de Cataluña, y eso significa la partición de España. ¿De verdad es sobre eso sobre los que piden diálogo quieren tratar?