El presidente de la Asociación Española de Banca, José María Roldán, durante su intervención. EFE
El presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), José María Roldán, ha pedido hoy al nuevo Gobierno que despliegue toda su capacidad negociadora y el mayor consenso posible «con sentido de Estado» para cumplir con los compromisos con Europa y terminar las reformas pendientes.
En un desayuno informativo organizado por el Fórum Europa, Roldán ha añadido que, en esta etapa, será indispensable «saber actuar con pragmatismo» y combinarlo con el consenso, pues la economía española «no puede permitirse el lujo de no mantener su credibilidad» y en 2016 «hemos estado jugando con fuego».
Sobre la posibilidad de que no se alcance un acuerdo sobre los Presupuestos Generales del Estado, y eso lleve a convocar un nuevo proceso electoral, Roldán ha asegurado que «unas terceras elecciones no serían buenas para nadie» y ha confiado en que «seamos todos capaces de sacar adelante unos presupuestos que respeten los compromisos contraídos con Europa».
«No nos queda más remedio», ha dicho.
Para dejar atrás la crisis -ha insistido- «debemos ser capaces de mantener una década de buen comportamiento de la economía» y de crecimiento, pues la crisis ha sido larga y la recuperación también ha de serlo.
La economía española aún tiene algunas fragilidades, como el elevado endeudamiento con el exterior, que en términos brutos está en torno al 180 %, ha recordado.
En 2016 hubo algunos vientos de cola que ayudaron a la recuperación, como los bajos tipos de interés o el precio del crudo, pero en 2017 «no empujarán con la misma fuerza, aunque no se transformen en vientos de cara», por lo que «no podemos caer en la complacencia».
«Cabe esperar», explicó, que a partir de ahora se desbloqueen algunas iniciativas de empresas y particulares pospuestas en los últimos meses por la falta de Gobierno, y ayuden a impulsar la economía.
En cualquier caso, para Roldán es imperativo «recuperar el tiempo perdido y mirar hacia adelante» con un gran sentido de Estado para abordar las reformas pendientes que España necesita.
Preguntado sobre si tras el triunfo de Donald Trump en las elecciones de EEUU España podrá seguir convenciendo a los inversores de ese país para que confíen en nuestros activos, explicó que «habrá que adaptarse a las nuevas circunstancias», pero aclaró que «convencer a los inversores internacionales depende más de lo que nosotros hagamos que de lo que hagan otros».
Y además, de momento «no sabemos cuales van a ser las políticas del nuevo presidente», aunque todo apunta a que parece tender hacia políticas fiscales expansivas y políticas monetarias más contractivas. EFE
