La misión finalizará mañana con su descenso controlado sobre una región de fosas activas en la“cabeza” del cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko.
Pero hoy, la ESA ha presentado los momentos científicos culminantes de la misión Rosetta, que comenzó el 2 de marzo de 2004, y recorrió 6.400 millones de kilómetros hasta llegar al cometa en agosto de 2014.
Rosetta se encuentra ahora a 600 millones de kilómetros del Sol y por eso ya no va a recibir energía solar suficiente para seguir en funcionamiento.
Más o menos la misma distancia a la que se encontraba en enero de 2014 cuando la ESA la desconectó y entró en una especie de invernación.
Respecto de la Tierra, Rosetta se encuentra ahora algo más lejos, a unos 700 millones de kilómetros.
“Llega el momento en el que se van a analizar muchos datos, probablemente durante diez años más, queda mucho trabajo”, dijo a EFE Gerhard Schwehm, que fue director de la misión Rosetta entre 2004 y 2013 y científico del proyecto durante veinte años.
“Es muy improbable que el agua de la Tierra viniera de cometas similares a 67P/Churyumov-Gerasimenko” porque la proporción de agua pesada en el cometa es muy elevada, unas tres veces superior a la de la Tierra, añadió Schwehm.
Es posible que fueran los asteroides los que trajeron el agua en gran parte a la Tierra, según el científico alemán. EFEFUTURO