Hangzhou (China), 4 sep (EFE).- La primera ministra británica, Theresa May, y el presidente ruso, Vladímir Putin, abordaron hoy medidas para mejorar la relación entre ambos países tras el «brexit» y a pesar de sus diferencias.
Ambos mandatarios mantuvieron un encuentro al margen de la cumbre del G20 en Hangzhou (este de China) y mostraron su voluntad de estrechar los lazos bilaterales, después del deterioro que sufrieron durante el período de David Cameron.
«Es evidente que usted y su equipo se enfrentan a una complicada tarea, pero todos nos enfrentamos a grandes retos.
Les deseamos éxito y esperamos poder llevar las relaciones bilaterales a un nivel más alto que el actual», recalcó Putin a la líder británica en su primer encuentro desde que May accediera al poder.
El presidente ruso, no obstante, no obvió las dificultades por las que pasa la relación entre Londres y Moscú, y añadió: «Sinceramente, tenemos mucho que hacer, tanto en la esfera política como en la económica».
May esperó por su parte que ambos puedan tener una relación y un diálogo «sincero y abierto», en su búsqueda de nuevos aliados para el futuro del Reino Unido «post-brexit».
«Aunque reconozco que hay algunas diferencias entre nosotros, también hay áreas y asuntos complejos y serios a tratar», manifestó.
En la que es su primera cumbre del G20, la primera ministra británica aprovechó la ocasión para transmitir a Putin su confianza en que el Reino Unido saldrá «exitoso» de los desafíos a los que se enfrenta.
Además, en su primera intervención ante los medios tras llegar a Hangzhou, May volvió a insistir en que, «efectivamente, ‘brexit’ significa ‘brexit'», alejando cualquier opción de permanecer en la Unión.