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El sector editorial crece un 2,8% impulsado por la novela y el libro de texto

El sector editorial crece un 2,8% impulsado por la novela y el libro de texto

El sector editorial creció en 2015 un 2,8 por ciento, hasta los 2.257 millones de euros de facturación, un dato impulsado por la novela y el libro de texto que permite un «cierto optimismo» aunque aún queda lejos del año récord, 2008, cuando fue de un 30,8 % más.

«La cierta recuperación del año 2014 se ha convertido en una recuperación cierta, aunque existen sombras para matizarla», ha dicho hoy el presidente de la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE) y de la Asociación de Cámaras del Libro de España, Daniel Fernández, en la presentación del análisis del Mercado del Libro en España 2015.

Los datos todavía están «lejos» de los de 2008, algo que Fernández ha achacado a la «tormenta perfecta» de la crisis económica y a los cambios de hábitos de lectura, que provocaron cinco ejercicios seguidos de caída, hasta 2014, cuando creció un 0,6%.

La novela concentró la subida de la facturación en 2015, con un incremento del 8,8%, algo que «también ha ocurrido en otros países europeos» y demuestra una «vuelta» a la lectura de ocio en papel.

El crecimiento del pasado año se debe también a los libros científico-técnicos y universitarios (16,5% más), así como la de los libros de texto no universitarios, cuyo aumento del 12% en la facturación estuvo marcada por la entrada en vigor de la Lomce.

El libro digital, con un peso del 5% en relación con el papel, incrementó su facturación en un 4,9% hasta situarse en 115,4 millones de euros, un dato «modesto» que contrasta con el 37,3% registrado en 2014.

Otra de las novedades ha sido el retroceso del 5,9% en el libro infantil y juvenil, una materia que había crecido siempre a pesar de la crisis económica.

«Hace ya más de un año que presentamos un Plan Integral de Fomento del Libro que el ministro acogió y defendió en sede parlamentaria, aunque ha quedado parado», ha recordado Fernández.

El proyecto incluía aumento de la dotación presupuestaria de las bibliotecas -que en 2015 perdieron un 7% de su peso en la venta de ejemplares-, así como un plan de rescate a las librerías, principal canal de distribución.

El presidente de FGEE ha reclamado «medidas eficaces» para luchar contra la piratería editorial, por la que se dejaron de ingresar en 2015, según sus datos, 108 millones de euros, y ha destacado la «doble cara» del surgimiento de pequeñas editoriales en España: «positiva» porque evita la «excesiva» concentración y «negativa» por la «fragmentación brutal» del sector.

En 2015, la facturación del libro de bolsillo continuó reduciéndose y perdió un 9% respecto a 2014; además, el precio medio de cada ejemplar se situó en 14,52 euros -7,76 euros los de bolsillo- y se editaron un total de 80.181 títulos, con 586.811 vivos.

En el comercio exterior, las exportaciones del libro alcanzaron los 552,36 millones de euros, con un incremento del 3,2% y un saldo neto de la balanza comercial que alcanzó los 324,38 millones de euros y siguió siendo positivo.

En cuanto a las consecuencias que el «brexit» podría acarrear para el sector editorial, Antonio María Ávila, director ejecutivo de la FGEE, ha señalado que España exporta 48 millones de euros anuales al Reino Unido pero que ese mercado «no tendría por qué» verse afectado ya que existen acuerdos «anteriores a la integración de ambos países en la Unión Europea».

El ministerio de Educación, Cultura y Deporte avanzó hoy también los datos del ISBN contenidos en su Panorámica sobre la Edición Española de Libros 2015, según los cuales la producción de libros aumentó en 2015, tanto en formato digital como en papel, hasta alcanzar los 79.397, un 0,2% más que en 2014.

El estudio, que no contabiliza, por primera vez, las reimpresiones, señala que los libros impresos aumentaron un 0,4% y representan un 71,9% del total mientras que los de otros formatos, el 28,1% restante, cayeron un 0,3%.

La distribución entre editoras privadas y públicas se situó en un 91% y 9%, respectivamente, lo que supone un retroceso del 10,6% para la edición pública, que en el ejercicio anterior había sido el 10,1% del total.

En Madrid y Barcelona se editan el 62,1% del total de libros, aunque en ambas ha descendido, un 3,2% y un 3,6%, respectivamente.

Les sigue Andalucía, con el 13,6%, lo que supone un aumento del 11,8%; Valencia, con un 7,4% y una subida del 18,4%.

El 92,9% de los libros se editó en lenguas españolas: el 84,7% en castellano; el 10% en catalán; el 1,9% en gallego, el 1,7% en euskera y el 1,7% en valenciano. EFE

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