El director del Museo Guggenheim Bilbao, Juan Ignacio Vidarte, ha advertido hoy de que el centro tiene un problema de capacidad y necesita contar con espacios expositivos «adicionales» para mantener su posición de liderazgo entre las instituciones museísticas del mundo.
Vidarte ha planteado este problema en el transcurso de una conferencia en el Foro Nueva Economía en la que ha repasado lo conseguido desde la puesta en marcha en 1991 del proyecto para construir en Bilbao una museo de arte contemporáneo de la marca Guggenheim.
El máximo responsable de la institución museística bilbaína ha señalado, respecto a los desafíos de futuro que debe afrontar el Museo, que uno de ellos será el de conseguir nuevos espacios expositivos «si queremos seguir disfrutando de la posición de liderazgo entre las instituciones museísticas del mundo».
En los 25 años que han transcurrido desde que Frank Gehry diseñó el edificio del Museo -ha precisado-, «han surgido nuevas pautas de relación con la actividad artística que demandan diferentes enfoques museológicos y, en consecuencia, si queremos seguir siendo una institución de referencia que apueste por estar en la vanguardia, es preciso abordar este proyecto de ampliación».
En este apartado se ha referido al proyecto de ampliación discontinua de sus instalaciones en la comarca vizcaína de Urdaibai planteado hace 8 años y que quedó en suspenso, una vez concluida su primera fase, al desatarse lo más crudo de la crisis económica y por la oposición al mismo de los responsables del Gobierno Vasco, entonces dirigido por el PSE-EE.
«El proyecto de Urdaibai fue entonces, y quizás lo sigue siendo hoy, la fórmula que el museo pensó para reinventarse como institución y, sea en esta ubicación o en otra, eso no me corresponde a mi decidirlo, lo que es irrenunciable es no desistir en dar una respuesta adecuada a este problema», ha señalado.
Ha precisado que la plasmación del proyecto de Urdabai «no depende solamente de la voluntad» de los responsables del Museo bilbaíno, sino de «la capacidad y de la decisión de las instituciones públicas que tendrían que colaborar en su financiación».
Otra cuestión importante para asegurar el futuro del Guggenheim Bilbao que ha apuntado Vidarte en su intervención es la de retomar «a corto plazo» la compra de obras para los fondos propios del Museo, actividad que lleva en suspenso desde hace cinco años, desde que se agravase la crisis económica, ha recordado.
Vidarte ha añadido que la colección propia del Museo, que actualmente cuenta con 130 obras de 64 artistas de relieve mundial, en la que se gastó 110 millones de euros entre 1996 y 2011 y que actualmente está valorada en 770 millones, es la «columna vertebral del Museo y su mejor garantía de futuro». EFE
