París ha sufrido este viernes un atentado múltiple que ha dejado al menos 120 muertos en varios ataques, perpetrados hasta en seis puntos de la capital francesa, aunque el asalto más grave ha ocurrido en la sala de conciertos Le Bataclan, donde unas 70 personas han perdido la vida. Ante la gravedad de la situación, el presidente de Francia, François Hollande, ha decretado el estado de emergencia en todo el país, acompañado del cierre de las fronteras y el despliegue de 1.500 soldados.
Un total de seis puntos han sido golpeados en la capital: el Estadio de Francia, la sala de espectáculos ‘Bataclan’, el restaurante ‘Le Petit Cambodge’, el local ‘Belle Équipe’, el bar ‘Le Carillon’ y en el Boluevar Fontaine .
Siete de los ocho terroristas abatidos tras los atentados fallecieron al hacer explotar sus cinturones explosivos, informó la Fiscalía. El ministerio público informó de que tres de los cuatro asaltantes de la sala Bataclan llegaron a activar sus cinturones explosivos. El cuarto fue abatido durante el asalto que lanzaron las fuerzas especiales en ese teatro del centro de París. Otros tres atacantes murieron al detonar las bombas que portaban en las inmediaciones del Estadio de Francia. Por ahora, se desconoce si hubo más individuos implicados.
Hay, además 200 heridos, de los que 80 están en estado grave. Fuentes oficiales hablan de 120 muertos, aunque como una cifra provisional. El consulado español en Francia ha habilitado el teléfono 0033 615 938 701 para dar información sobre los españoles que viven en París.
Hollande ha hablado de «atentados terroristas sin precedentes» y de «decenas de muertos» en una comparecencia pública tras la celebración de un Consejo de Ministros extraordinario, cuando los ataques seguían en curso, en la que ha llamado a la calma y a la unidad.
El fiscal general de Francia, François Molins, ha informado de que cinco asaltantes han sido «neutralizados», es decir, abatidos por las fuerzas de seguridad, aunque se teme que aún haya terroristas huidos. Fuentes de la policía citadas por AFP elevan la cifra a siete terroristas muertos, cuatro en la sala Le Bataclan y tres en las inmediaciones del Estadio de Francia.
«La investigación se centrará en determinar que ha pasado en seis lugares: el Estadio de Francia, el bulevard de Charonne donde ha habido 18 muertos, el bulevard Voltaire con un muerto, la calle Alibert con 14 muertos y la calle de la Fuente Real con cinco muertos», ha detallado Molins, que no ha precisado los fallecidos en el sexto escenario, Le Bataclan, limitándose a señalar que allí el recuento es «extremadamente grave».
Masacre en Le Bataclan
En el centro de la ciudad, los terroristas han recorrido varios bares y restaurantes, abriendo fuego contra la gente, hasta llegar a Le Bataclan, una sala de conciertos muy conocida en el circuito musical parisino situada en el distrito XI de París y capaz de albergar hasta 1.500 personas, donde se celebraba una actuación del grupo Eagles of Death Metal.
Allí, cuatro terroristas, armados y con cinturones explosivos, han irrumpido a tiros y han retenido a decenas de personas en el interior durante horas, antes de que las fuerzas de seguridad asaltaran el recinto. Finalmente, los asaltantes han sido abatidos, aunque antes tres de ellos han hecho estallar sus explosivos. Cuando las fuerzas del orden han entrado en la sala, han encontrado multitud de cadáveres.
El propio presidente François Hollande y varios miembros del Gobierno han visitado después el lugar para conocer el escenario de la masacre. «Queríamos estar ahí junto a todos aquellos que han vivido estas atrocidades, para decir que no nos van a ganar. Ha sido una barbarie, una atrocidad», ha dicho Hollande, que ha garantizado una lucha «implacable» contra el terrorismo.
Aunque ningún responsable ha avanzado detalles sobre la posible autoría del atentado, varios testigos han señalado que los asaltantes gritaban «Alahu Akbar» («Alá es el más grande») mientras disparaban con armas automáticas.
Así lo ha contado un testigo a la emisora France Info, explicando que estaba con su madre en Le Bataclan y que varios individuos han irrumpido y han empezado a disparar.
Ha relatado que escuchó en varias ocasiones a los autores de los tiros gritar «Alahu Akbar» y que después de una ráfaga, cuando parecía que los presuntos terroristas se habían marchado, escapó con su madre.
Otras 40 personas habían logrado salir de la sala de conciertos antes de que las fuerzas de seguridad llevaran a cabo el asalto definitivo que ha puesto fin al infierno en que se había convertido la noche parisina, en una de las jornadas más negras de la historia de Francia.
Explosiones en pleno partido
Al mismo tiempo, junto al Estadio de Francia, donde se disputaba el partido amistoso de fútbol entre Francia y Alemania, se han sucedido tres explosiones que han causado varios heridos.
Las detonaciones no han suspendido el partido, pero la policía ha mantenido cerrado el estadio hasta mucho después de acabado el encuentro, cuando ha ido filtrando la salida de los espectadores a través de tres puertas. Algunos de los presentes entonaban la Marsellesa en su salida.
Desplegadas las fuerzas especiales
La alcaldía de París ha recomendado a través de su cuenta de Twitter que los ciudadanos que permanecieran en sus casas, sin salir a la calle. Asimismo, ha pedido a los establecimientos que abran al público que refuercen las medidas de seguridad.
También la policía ha recomendado que nadie salga de casa salvo que sea verdaderamente necesario y el consorcio de transportes parisino, la RATP, ha suspendido la circulación en dos tramos de la línea 4 y de la línea 5 de metro. Este sábado, todos los colegios y universidades de la región de París permanecerán cerrados.
Numerosas fuerzas especiales han sido desplegadas por todo el centro de París, mientras la Fiscalía Antiterrorista se hace cargo de la investigación. Todos los hospitales de Île de France se mantuvieron abiertos con la incorporación inmediata de más de 1.000 profesionales para ayudar en el terrible balance de víctimas. La Policía ha confirmado que cinco asaltantes han sido neutralizados, informó el fiscal general, François Molins.
La ola de atentados en la capital tiene lugar diez meses después del ataque en la revista ‘Charlie Hebdo’ y un supermercado de comida judía, donde fallecieron 18 personas. Asimismo, se produce en medio de la participación de Francia en la coalición liderada por Estados Unidos para luchar contra el Estado Islámico en Irak y Siria. Es más, este mismo viernes se había realizado el anuncio de la muerte por un drone de EEUU del mayor verdugo del IS, ‘Yihadi John‘. Simpatizantes del Estado Islámico han celebrado lo que ya es el mayor atentado de la historia de Francia.
