El pasado 6 de noviembre, fue dada de alta la auxiliar de clínica infectada de ébola por «contagio», Teresa Romero. Desde aquí manifestamos nuestra alegría por su recuperación. Ningún facultativo o sanitario, del mismo equipo, fue contagiado.
El alta fue acompañada de la noticia de que Teresa, dejaba en manos de sus abogados el hecho en cuestión. Desde este mismo espacio-editorial se observaron luces y sombras en el “alta» de Teresa Romero.
Hoy ya anuncia que sus abogados («Garzón abogados») van a pedir, nada más y nada menos, que 150.000 euros por atentar al honor de la auxiliar de clínica infectada de ébola por «contagio». Las luces de las sombras que se atisbaban con intereses económico-políticos ya iluminan el camino a seguir.
La auxiliar de enfermería Teresa Romero y la médico de familia que la atendió en un centro de salud de Alcorcón han llegado hoy a un acuerdo de conciliación después de que la primera haya reconocido que no informó a la doctora de que había estado en contacto con pacientes con ébola.
Romero ha aceptado íntegramente la declaración de la doctora y ha reconocido que en ningún momento rebasó el umbral de fiebre fijado en 38,7 grados, según ha indicado la abogada de la médico de familia.
Sea como fuere, si hubiera comunicado a su médico de atención primaria que estuvo en contacto con enfermos de ebola, la doctora habría solicitado una ambulancia extremando las precauciones habidas y por haber para que la llevasen al Carlos III y a todos los pacientes del centro de salud les hubieran realizado el test para saber si habían estado en contacto con Romero.
Es evidente que Teresa Romero mintió. Y que si pertenece a un sindicato y se contagio de ébola, los abogados del sindicato vieron que era el momento de arremeter contra la Comunidad de Madrid y la gestión del Consejero de Sanidad.
Tal vez a Romero le prometieron el oro y el moro, aunque 150.000 euros por el perro, creo que es una indemnización no contemplada en una aseguradora por un accidente.
La cuestión es que ha quedado clara la motivación económica y política en sus falsas acusaciones.
Directora NI