Hay más evidencias de que unas viviendas peores se vinculan con unas tasas más elevadas de asma en los niños.
En un nuevo estudio, unos investigadores liderados por el Dr. Andrew Beck, pediatra del Centro Médico del Hospital Pediátrico de Cincinnati, rastrearon los vínculos entre las infracciones de la normativa de las viviendas públicas (infracciones como la presencia de moho y cucarachas en las casas) y la salud de más de 4,300 niños de 1 a 16 años de edad.
Todos los niños fueron hospitalizados por ataques de asma en el Centro Médico del Hospital de Cincinnati entre 2009 y 2012.
El equipo de Beck encontró que los niños que vivían en áreas con más infracciones de la normativa de vivienda tenían casi el doble de probabilidades de volver a ser hospitalizados o de volver a visitar las urgencias hospitalarias en un plazo de 12 meses, en comparación con los que vivían en áreas con menos infracciones en la habitabilidad de la vivienda.
Esto significa que «las agencias locales que obligan a cumplir la normativa sobre habitabilidad de la vivienda pueden asociarse con los sistemas de atención de la salud para centrarse en la atención del asma pediátrico», señaló Beck en un comunicado de prensa del hospital. «Esas agencias conservan datos que se pueden usar para detectar las agrupaciones potenciales de [enfermedades por] asma».
El estudio aparece en la edición de noviembre de la revista Health Affairs.
FUENTE: Cincinnati Children’s Hospital Medical Center, news release, Nov. 3, 2014