El Departamento de Defensa de Estados Unidos ha admitido este miércoles que parte de la ayuda militar que ha enviado por vía aérea a las fuerzas kurdas ha caído en manos del Estado Islámico
«Ayer anunciamos que uno de nuestros fardos se perdió y fue destruido. Lo hemos revisado y hemos determinado que un segundo fardo también se perdió y que probablemente cayó en manos enemigas», ha dicho el portavoz del Pentágono, el coronel Steve Warren.
Como contrapartida, Warren ha destacado que otros 26 paquetes de ayuda militar han llegado a las fuerzas kurdas desplegadas en la ciudad de Kobani.
Estados Unidos ha respondido así a las cuestiones que han surgido después de que el Estado Islámico difundiera ayer un nuevo vídeo en el que muestra las armas lanzadas por Estados Unidos en los alrededores de Kobani.
En el vídeo uno de los milicianos suníes del Estado Islámico muestra un conjunto de cajas agrupadas con una malla y atadas a un paracaídas negro y una hilera de al menos 15 cajas, algunas de las cuales contienen proyectiles y granadas.
En ocasiones anteriores, el Estado Islámico ha difundido vídeos en los que sus combatientes aparecen en vehículos militares estadounidenses. Además, se cree que han conseguido robar tres aviones de guerra de una base iraquí.
Aviones estadounidenses C-130 entregaron en la madrugada del lunes por vía aérea armas, municiones y medicamentos a los combatientes kurdos que luchan contra el Estado Islámico en Kobani, ubicada cerca de la frontera con Turquía.
El consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca Ben Rhodes aseguró entonces que los envíos habían llegado a las manos indicadas. «Estamos seguros de que, cuando hacemos entregas aéreas como la de Kobani, somos capaces de llegar a la gente que queremos llegar», dijo.
Sin embargo, horas después el Mando Central de Estados Unidos informó de que había tenido que bombardear los puntos donde habían caído algunos de los paquetes destinados a las fuerzas kurdas, porque estaban en poder del Estado Islámico.
«En Siria, seis bombardeos cerca de Kobani han destruido (…) un fardo de suministros kurdos perdidos (que habían sido) lanzados en paracaídas por Estados Unidos para evitar que caigan en manos enemigas», dijo el Mando Central.
