La futura alta representante de la Política Exterior europea, Federica Mogherini, abogó el lunes por la «firmeza» y la «diplomacia» para tratar con el «oso» ruso.
«Rusia puede no ser un socio en este momento, pero es un país estratégico y un vecino», dijo en su audiencia ante el Parlamento Europeo Mogherini, que fue designada a finales de agosto como responsable de la diplomacia del próximo Ejecutivo europeo.
Interrogada sobre la táctica a adoptar con el «oso ruso», la ministra italiana de Relaciones Exteriores respondió con humor que «no tiene mucha experiencia con osos». «Pero necesitamos una mezcla de firmeza y de diplomacia, aunque el equilibrio depende de la reacción del oso».
A principios de septiembre, Mogherini, a la que acusan muchos países del Este de ser cercana a Moscú, aseguró que Rusia ha dejado de ser un «socio estratégico» por su papel en la crisis ucraniana, pero sigue siendo un «actor estratégico en los desafíos regionales y mundiales».
El lunes, habló de la necesidad de «implicar» de nuevo a Moscú, en particular en lo que respecta al desarme nuclear.
La futura alta representante de la Política Exterior europea, Federica Mogherini, abogó el lunes por la «firmeza» y la «diplomacia» para tratar con el «oso» ruso.
«Rusia puede no ser un socio en este momento, pero es un país estratégico y un vecino», dijo en su audiencia ante el Parlamento Europeo Mogherini, que fue designada a finales de agosto como responsable de la diplomacia del próximo Ejecutivo europeo.
Interrogada sobre la táctica a adoptar con el «oso ruso», la ministra italiana de Relaciones Exteriores respondió con humor que «no tiene mucha experiencia con osos». «Pero necesitamos una mezcla de firmeza y de diplomacia, aunque el equilibrio depende de la reacción del oso».
A principios de septiembre, Mogherini, a la que acusan muchos países del Este de ser cercana a Moscú, aseguró que Rusia ha dejado de ser un «socio estratégico» por su papel en la crisis ucraniana, pero sigue siendo un «actor estratégico en los desafíos regionales y mundiales».
El lunes, habló de la necesidad de «implicar» de nuevo a Moscú, en particular en lo que respecta al desarme nuclear.
En el capítulo de los derechos humanos, también dijo que la tortura en China estará en el «centro» de su política y será discutido con las autoridades de ese país.
En cuanto a la movilización prodemocracia en Hong Kong, aseguró que es del interés no solo de la población y de las autoridades de Hong Kong, «sino también de las autoridades chinas, resolver el asunto de las próximas elecciones de 2017 de manera satisfactoria para todos».