Acabamos de conocer por la Memoria de la Fiscalía General del Estado correspondiente a 2013 que los grupos disidentes de ETA, Iraultzaileen Bilguneak (IBIL), se han dedicado a la captación y formación de nuevos miembros durante los últimos meses para volver a la violencia y continuar con las acciones de terror, lo que siempre había sido esa organización asesina.
¿Alguien había creído que se estaba desorganizando, desmantelando y entregando las armas después de unos meses sin secuestros o asesinatos?
Conviene no confiarse ni bajar los brazos ante quien tiene en su curriculum casi un millar de asesinatos y muchos miles de personas afectadas por sus acciones. Más bien, se necesita mantener las defensas bien alertas ya que cuando menos se espera pueden necesitarse.
La Fiscalía de la Audiencia Nacional sostiene, a partir de los informes remitidos por la Comisaria General de Información de la Policía y el Servicio de Información de la Guardia Civil, que estos grupos son “contrarios a la actual estrategia de ETA” y “no renuncian a la utilización de todo tipo de lucha, incluida la armada”.
Hoy tenemos un aviso. IBIL no descansa. Quieren volver al terror y para ello reclutan y forman a jóvenes integrantes que aceptan promesas por un puñado de monedas. ETA no está disuelta, ni ha entregado las armas, ni se ha rendido, ni ha pedido perdón. Algunos miembros, sí. Pero ya vemos que otros no lo han hecho y que por debajo puede llegar otra hornada de aprendices asesinos, según informa la Fiscalía General del Estado.
¿Alguien se había creído lo del alto el fuego permanente y lo de la tregua indefinida?
Redacción
Navarra Información
