Los sindicatos de Adif (CC.OO, UGT, CGT, Sindicato Ferroviario y Sindicato de Circulación) ya han anunciado la huelga de 46 horas ininterrumpidas para la operación salida y regreso de vacaciones, para el próximo 31 de julio a 31 de agosto. Asímismo, han informado de que lo harán extensivo también en Renfe.
Los sindicatos tienen, entre sus tareas, la defensa de los trabajadores y la buena marcha laboral de los mismos. Es una lástima que utilicen para sus objetivos las fechas que más protagonismo mediático les otorga siempre en detrimento de los usuarios. Estas actuaciones sindicales, unidas a la corrupción, son un suma y sigue que hincha el malestar y descontento de los ciudadanos para con estas organizaciones sindicales.
Difícilmente, deberían conseguir sus objetivos cuando los usuarios son los perjudicados y las empresas obtienen pérdidas. Pero alejados de una ley que normatice con justicia el derecho a la huelga, el derecho al trabajo, el derecho de la empresa y el de los usuarios, tenemos unas organizaciones e instituciones subvencionadas que -parece- trabajan en beneficio propio y no común.
En presente y futuro (también en pasado), tal y como está constituida la sociedad, la economía, la política, la empresa y el trabajo, la reflexión es: ¿realmente, son necesarios los sindicatos? ¿realmente, son necesarias las subvenciones que reciben para que luego pacten con empresas y gobiernos sus movilizaciones y contraposiciones? ¿realmente, los trabajadores son defendidos en sus derechos laborales o son meramente utilizados?
Las investigaciones, dentro y fuera de España, apuntan hacia la malversación de fondos y corrupción también en los sindicatos.
Hoy, con el paro a cuestas, lo que mejor entiende la sociedad es: trabajo y trabajar.
Directora NI
