Otro día internacional de algo. Hoy 5 de junio, Día del Medio Ambiente y Barbados, isla caribeña exbritánica, elegida por la ONU como Sede oficial para las celebraciones del Medio Ambiente. Despilfarro y gasto, además en plural.
Está muy bien que se apoye a islas, países, colonias, comunidades etc… para el desarrollo económico, muy bien y es plausible del todo. Pero que se utilice el concepto de cambio climático y el día del Medio Ambiente para despilfarrar y gastar el dinero de las subvenciones nacionales e internacionales, no está tan bien.
El cambio climático tiene sus dotes de popularidad informativa y mediática. Ya hemos olvidado aquello de la capa de ozono, ahora vamos a las costas, lluvia, nieve, calentamiento, enfriamiento, nubes, sol…. y, como no, a las energías renovables. Esas energías que viven de subvenciones públicas que son carísimas para el consumidor, empresas y organismos públicos. Esas que, en gran medida, perjudican al medio ambiente, no sólo en la parte estética sino también en la protección del hábitat natural de especies y cultivos.
Pero lo que es cierto, el dinero y el despilfarro económico y estructural que ocasiona todo el llamado -por quienes viven de las subvenciones- cambio climático. Es una forma de enriquecimiento de unos pocos, muy pocos. Y no sólo éso, sino que en su delirio medio ambiental, también están intentando ser la naturaleza misma de ese cambio. Hasta el punto de que son capaces de generar nubes de agua cuando no hay.
Lo que está ocurriendo es que en aras de esa defensa climática, está invirtiendo la propia naturaleza natural. También en esto se juega a sustituir a Dios por el hombre.
En lugar de tanto gasto y tanta ideología política detrás, deberían utilizar los medios para adaptarse a los cambios naturales y respetando la naturaleza y sus cambios.
Directora Navarrainformacion.es
