El PP afronta la campaña electoral de las europeas con dos datos positivos para este partido conocidos hoy mismo: por un lado, la caída del paro el mes pasado, y por otro, una ventaja en estimación de voto sobre el PSOE de 5,7 puntos, según el último Barómetro del CIS, correspondiente a abril, que acaba de conocerse ahora. El PP ganaría las elecciones generales con el 31,9 por ciento de los votos, frente al 26,2 por ciento del PSOE, que sigue cayendo. Desde enero, ha vuelto a perder cuatro décimas, y el PP, dos.
Lo que refleja el Barómetro del CIS, realizado entre el 1 y el 7 de abril, es un nuevo retroceso de los dos grandes partidos en España: entre los dos pierden seis décimas, aunque la caída del PSOE es mayor. Sin embargo, la caída de los grandes no se traduce en esta ocasión en una subida de los pequeños. Como se viene viendo desde hace meses, los partidos minoritarios parecen haber tocado techo. Es el caso de Izquierda Unida, que pierde otras cuatro décimas y pasa del 11,3 por ciento en enero al 10,9 por ciento en estimación de voto. UPyD también pierde terreno, y pasa del 9,2 por ciento al 8,9 por ciento.
Los nacionalistas catalanes tampoco consiguen subir: CiU cae del 3,4 en enero al 3 por ciento en abril, mientras que ERC se queda estancado en el 2,5 por ciento. Incluso el PNV, en el País Vasco, pasa del 1,5 por ciento al 1,1 por ciento.
El ministro mejor valorado, según el CIS, era Miguel Arias Cañete, que cuando se hizo el estudio aún estaba al frente de Agricultura. Consigue un 3,17. Mariano Rajoy se queda con un 2,29, y Alfredo Pérez Rubalcaba, con un 2,93.
Y si bajan todos, ¿quién sube? Sube una fuerza minoritaria como Compromís-Equo, que pasa del 0,8 por ciento al 1,7 por ciento. Y también sube la opción de «otros partidos»: el 6,6 por ciento de los votos irían a parar allí (en enero eran el 5,6 por ciento). Además, sube el voto en blanco, del 3,7 por ciento al 4,7 por ciento.
