Los profesores podrán confiscar el móvil u otros dispositivos electrónicos a los alumnos cuando, con su uso, provoquen distracciones en clase o dañen a terceros. Con ello, se quieren evitar situaciones como la grabación y difusión de las clases para fines no autorizados, así como cualquier escena relacionada con la vida privada de las personas.
Para ello, el Departamento de Educación está tramitando una incorporación a la normativa que regula la convivencia en los centros educativos públicos y concertados de Navarra (Decreto Foral 47/2010), en la que se insta a los colegios e institutos a que incluyan en sus respectivos planes de convivencia un protocolo de uso de las TIC, en el que se especifiquen las normas para su uso seguro.
La medida permitirá a los docentes retener los equipos hasta final de clase, pero, además, dará a los centros la posibilidad de confiscar los aparatos hasta que los padres vayan a recogerlos, cuando se trate de un problema de calado o haya que establecer pautas y límites al alumno.
Los técnicos del Departamento de Educación están explicando estos días esta y otras novedades, junto con el régimen jurídico vigente sobre la convivencia en los centros, a los equipos directivos de los centros. La primera reunión tuvo lugar el pasado martes, 29 de abril, en Pamplona, con la asistencia de 150 personas, y la segunda se celebrará el martes, 6 de mayo, en Tudela.