Gracias a la moción presentada por UPyD, el Pleno del Congreso de los Diputados rechazó el derecho a decidir de Cataluña. PP y PSOE apoyó y votó a favor de la moción presentada por UPyD. El resto del hemiciclo CIU, PNV, ERC Y AMAIUR votó en contra.
Lo más lamentable es que el partido del gobierno, con mayoría absoluta y con la dejación de funciones y silencio que muestra ante la burla de Mas con España y su secesionismo iluminado, no haya sido quien presentara al Pleno esta moción. De la misma manera que el PSOE, a modo de veleta, tampoco lo ha planteado. Y lo más grave, el PSC, es decir, el PSOE de Cataluña, se abstiene.
La verdad que esta abstención no es sino el fiel reflejo de lo que es el PSOE en general y el de Cataluña en particular. Rubalcaba en su carrera desenfrenada de ser “algo” dentro de su partido baila al compás que él mismo marca, o sea, sin ritmo y sin rumbo. Mientras, sus acólitos socialistas catalanes siguen su ritmo propio y desenfrenado hacia el precipicio.
Lejos de entrar en cómo debe arreglar su casa un partido político, mi opinión al respecto, es para ser espejo de la realidad que debería producirse, de una vez por todas: la “secesión” del PSC del PSOE y, de paso, Rubalcaba podría justificarla como el símbolo del federalismo que han venido preconizando. Y el PP puede guardar silencio, mientras su partido empieza a dividirse.
Y algo sorprendente, Geroa Bai en el congreso denuncia, no sin razón, que las leyes impulsadas por el gobierno de Rajoy suponen “un muro” contra el que se estrella el empleo juvenil, pero ¿cuál ha sido su voto a la moción de UPyD? Porque para muro de contención contra la indivisibilidad de España, el progreso y el crecimiento, el secesionismo nacionalista catalán y vasco. Este último, también anexionista.
Directora de Navarrainformacion.es
