Un grupo de investigadores ha hecho nuevos avances en la lucha contra el Alzhéimer, descubriendo una nueva causa potencial de la enfermedad
Científicos de la Universidad de Duke en Carolina del Norte (EE. UU.) han hallado, durante experimentos con ratones, que las células del sistema inmune que normalmente protegen al cerebro, al ser afectadas por el Alzhéimer, llegan a consumir un aminoácido vital llamado ‘arginina‘, según informó The Independent.
El fármaco que se utilizó para bloquear la respuesta inmune del cuerpo a la arginina – conocido como difluorometilornitina (DFMO) – ya está siendo investigado en los ensayos de medicamentos para ciertos tipos de cáncer y puede ser adecuado para la prueba como terapia potencial de Alzheimer.
Impidiendo este proceso con un medicamento, los investigadores lograron obstaculizar la formación de placas en el cerebro e impedir la pérdida de memoria en ratones.
El estudio halló que aunque no está claro el papel preciso de las células del sistema inmunológico, la investigación podría orientar hacia una nueva causa potencial del Alzhéimer y eventualmente abrir otra puerta hacia un nuevo tratamiento.
«Si en definitiva el consumo de arginina es tan importante para el desarrollo de la enfermedad, probablemente podamos bloquearla y revertir la enfermedad», dijo Carol Colton, profesora de neurología de la Facultad de Medicina de Duke, una de las principales responsables del estudio.
El descubrimiento fue bien recibido por la comunidad científica del Reino Unido viniendo a llenar un vació en la comprensión del Alzheimer que podría «abrir nuevas puertas» a futuros tratamientos para esta devastadora enfermedad.
El Alzhéimer es un desorden neurológico con una elevada incidencia en personas mayores, que presenta una patología neurodegenerativa compleja que conlleva la pérdida progresiva de capacidades cognitivas -memoria, lenguaje, aprendizaje-, acompañada de trastornos psiquiátricos como ansiedad, depresión, apatía y agresividad.
El grupo de países del G8 se comprometió en 2013 en encontrar un tratamiento nuevo o cura para para la demencia en el año 2025, y el Gobierno del Reino Unido se comprometió a duplicar su contribución hacia este objetivo a 132 millones de libras para esa fecha.