El escudo de Fitero se compone de: Sobre fondo plateado, romero en la parte superior y una parra del mismo color en la inferior. Rodeándolo la cruz de Calatrava.
| FITERO | |||
| Categoría |
Villa
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| Superficie en km2 |
43,1
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| Distancia a Pamplona |
104,3
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| Altitud |
422
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| Habitantes |
2123
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Situación:
Limita con el municipio de Corella por el norte, los de Cintruénigo y Tudela por el este. Los de Tarazona (Zaragoza) y Cervera del Río Alhama (Rioja) por el sur y con este último municipio y Alfaro (Rioja) por el oeste.
El río Alhama atraviesa el término poco después de haber sido desembocado en el, otro río, el Linares.
Historia
En su término se localiza un asentamiento de la Edad del Hierro, en el lugar de la Peña del Saco. De época romana quedan vestigios en la Peña de Fitero. También en el lugar denominado la Morería, se ha descubierto un yacimiento de época romana.
Su término perteneció a Castilla hasta 1373. El origen del núcleo vecinal debe buscarse en las familias de los siervos y criados del monasterio del mismo nombre, que hasta el siglo XV residían en la zona hoy denominada «el Cortijo», en el centro de la actual villa. A causa de las guerras civiles entre beaumonteses y agramonteses durante el siglo XV, el abad fray Miguel de Peralta quiso aumentar la seguridad del monasterio y para ello inició la creación del pueblo (1482).
Atrajo población de la Rioja. El abad Martín de Egüés dictó las primeras ordenanzas municipales en 1524.
Entre 1643 y 1664 los vecinos intentaron fundar un nuevo pueblo, que se llamaría Villa Real, para librarse del dominio monástico; pero los monjes se lo impidieron. En 1675 hubo un violento motín y el asalto y saqueo del monasterio por parte de los vecinos. En 1770 el pueblo quiso crear una parroquia propia, separada del monasterio y dependiente del obispo de Tarazona, pero fracasó.
La villa no consiguió su definitiva emancipación hasta la desamortización de 1836.
Fitero fue desgajado de Navarra e incorporado a la nueva provincia de Logroño en 1822 y en 1840; pero en 1823 Fernando VII derogó toda la legislación de las Cortes y los gobiernos constitucionales de 1820-1823, y la ley de 1840 no se cumplió porque la Diputación se opuso.
