La creciente polarización de Túnez reflejada en la campaña se ha trasladado al recuento de la segunda vuelta, una vez que la candidatura del laico Essebsi ha reivindicado su triunfo sin esperar a los resultados oficiales, lo que ha rechazado su rival
El campo de Essebsi se atribuye la victoria en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Túnez.
A falta de resultados oficiales y en pleno recuento de votos de esta segunda vuelta, la polémica está servida. El equipo del candidato rival, el presidente saliente Moncef Marzouki, ha protestado ante las declaraciones del candidato Essebsi, de 88 años.
Pero lo cierto es que tres sondeos de agencias de prospectiva daban también la victoria a Essebsi con entre el 52 y el 55% de los votos.
La cifra de participación quedó en el 59,04%, según la Instancia Independiente para las Elecciones (ISIE). La asociación de observadores locales Murakibun cifró a las 15.00h la participación en casi el 50%.
Los colegios electorales cuentan con numerosa presencia de las Fuerzas Armadas y de la policía después de las amenazas de un grupo terrorista salafista de cometer atentados este domingo.
Essebsi, representa el modelo laico con más respaldo en el norte del país. Su movimiento político reúne a seguidores del dictador Ben Alí, sindicalistas, comunistas y liberales.
El sur es mayoritariamente partidario de Moncef Marzuki. El presidente saliente, favorable a los islamistas del partido Al Nahda, encarna “la defensa de la esencia de la revolución”.
Según la agencia France Presse, Essebsi ha saludo después a los cientos de personas congregadas ante su cuartel general de campaña y se ha lanzado un mensaje conciliador al decir que «el futuro obliga a trabajar juntos por Túnez« y, en declaraciones televisadas, ha dedicado su resultado a los «mártires» del país. Hay informes contradictorios sobre si él personalmente ha reivindicado el triunfo.
Noticia relacionada
https://www.navarrainformacion.es/destacado/elecciones-legislativas-de-tunez/
