Hoy 15 de septiembre, la Iglesia celebra la fiesta de San Nicomedes, mártir en la via Nomentana, y Santa Catalina de Génova, viuda
En la época de Domiciano, en el siglo I, el sacerdote romano Nicomedes fue descubierto sepultando a cristianos víctimas de persecución. Arrestado, se negó a sacrificar a los dioses paganos, fue asesinado y arrojado al Tíber. Su cuerpo, recuperado por un clérigo, fue sepultado en la Vía Nomentana.
Santa Catalina de Génova. Fue después de un encuentro con su hermana monja que Catalina, de la importante familia Fieschi, cambió su vida para dedicarse a los pobres y sobre todo a los enfermos de sífilis; fundó la Compañía de las Damas de la Misericordia. La «Señora Catalinita», como la llamaban, murió por la peste en 1510.