NAVARRA INFORMACIÓN
Cada fin de semana, cientos de estadios de fútbol abren sus puertas en España para dar cobijo a una de las competiciones más antiguas del mundo
Desde la máxima categoría hasta los niveles más locales, hay infinidad de resultados y de noticias que giran en torno al deporte rey en nuestro país. Los aficionados acuden con ilusión a animar a su equipo y vuelven a casa con la alegría o tristeza del resultado. Un proceso simple, acompañado por los futbolistas, la organización y los árbitros que dan forma a la competición. Desde ese punto de vista es sencillo, ¿pero cómo se organiza realmente cada jornada de fútbol en España?
En la cúspide está la Primera División, llamada ahora Liga Santander por cuestiones de patrocinio, donde se mueve el 80 por ciento de todo el dinero presente en el fútbol español. La Liga ha centrado sus esfuerzos en repartir los partidos en el mayor número de franjas horarias posibles, con el objetivo de optimizar las posibilidades de ingresos debido a las televisiones. Asia es el principal mercado, una región en el que la organización española compite con la Premier League por hacerse con el dominio, una lucha que hasta ahora están ganando los ingleses. Diez partidos que se disputan entre viernes y lunes en diferentes horarios, pero nunca a las 12:00 horas. Un juez dictó que ese horario debía quedar reservado para las categorías inferiores, como una conclusión provisional ante la larga pelea que llevan Liga y Real Federación Española de Fútbol en ese sentido.
Si en cada estadio de Primera se congregan decenas de miles de aficionados, especialmente ahora que se están flexibilizando las restricciones de aforo tras la pandemia, en las televisiones estas cifras se multiplican por más de diez. Cada partido de LaLiga Santander tiene una audiencia media cercana al medio millón de espectadores, solo en España; y estos datos se disparan si se contabilizan los aficionados de otros países que siguen los partidos por televisión. Teniendo en cuenta la organización en el estadio y la retransmisión televisiva, cada partido genera de forma directa más de cien puestos de trabajo, sin tener en cuenta a los futbolistas y cuerpo técnico de cada equipo.
La Segunda División española, por su parte, ha conseguido unos criterios de profesionalización de alto nivel, si bien no se acercan en cuanto a cifras a los que presenta la categoría superior. Si los clubes de Primera cuentan, en total, con 2.100 millones de euros de presupuesto; en la Liga Smartbank esta cifra no llega a los 250 millones. Unos datos que, pese a la diferencia, han permitido establecer un sueldo mínimo para los futbolistas y generar un gran acontecimiento en torno a cada uno de los once partidos que se disputan durante los fines de semana. La emoción por el ascenso, reforzada notablemente con la instalación del playoff, al que acceden los clasificados entre la tercera y sexta posición, es el principal atractivo de una competición que también compite con su homóloga inglesa por ser la mejor en su categoría.
Nueva categoría: Primera RFEF
Veintiún partidos con futbolistas profesionales y el objetivo es ampliar esta cifra a 41. Para ello se ha creado la Primera RFEF, una categoría inferior a la Segunda División que celebra su primera edición en esta temporada. Son dos grupos y compiten veinte equipos en cada uno de ellos. El objetivo de la Federación con esta nueva división es sustituir a la obsoleta Segunda B, subiendo el nivel de competitividad y calidad al reducir los equipos. Los inicios no están siendo fáciles, ya que las previsiones de vender rápidamente los derechos televisivos no se han cumplido y los presupuestos prometidos para los clubes en junio se han visto reducidos. Pese a ello, la competición ha iniciado con buenos datos de audiencia y grandes afluencias a los estadios.
La creación de esta nueva categoría obligó a una reorganización del fútbol a través de un complejo proceso de grupos y clasificaciones que dejó a algunos equipos históricos del fútbol español y a filiales en niveles muy inferiores a los esperados. Solo con el paso de los años los ascensos y descensos pondrán a cada equipo en su lugar, para conseguir un fútbol más profesionalizado y que mejore sus ingresos.
Segunda RFEF
A los 41 partidos que se disputan entre Primera, Segunda y Primera RFEF, se suman otros 45 correspondientes a la Segunda RFEF, la cuarta y última división de corte nacional. Las siguientes pertenecen a federaciones territoriales y sus partidos no salen de las comunidades autónomas correspondientes. Algunas televisiones han entrado en esta competición, pero no se ha producido de forma generalizada. La presencia de equipos de capitales de provincia ha llamado la atención de inversores, si bien las previsiones es que la mayoría de estas inversiones se agrupen en la categoría superior, siempre y cuando los equipos de más presupuesto cumplan con las expectativas y logren el ascenso. En total, 96 partidos que enfrentan a equipos de diferentes regiones y que constituyen la base del fútbol nacional.