Esparza (NA+), Barkos G.Bai), Chivite PSN), Ruíz Bildu), Buil Podemos) y De Simón I-E).
Este lunes ha sido jornada de análisis electoral para los principales partidos navarros, que desde primeras horas de la tarde han reunido a sus direcciones para leer el mensaje que han dejado en las urnas, y de momento no ha habido cambios sobre sus posiciones ya conocidas en torno al futuro político de la comunidad
Además algunos han optado por no hablar hasta que el miércoles se disponga de los resultados definitivos, puesto que aún no se conocen los de 18 mesas que suman el 1,86% de los votos y que podrían variar la composición final del Parlamento.
Este es el caso de IU, ha dicho su coordinadora, Marisa de Simón, que ha logrado el único escaño para la coalición y ahora puede estar en el aire, y también el de Ciudadanos, según ha comentado su portavoz, Carlos Pérez Nievas, quien ha indicado que será el jueves cuando se reúna la ejecutiva regional del partido.
El resto de formaciones sí que se han pronunciado al término de sus reuniones aunque sin sorpresas en sus planteamientos.
Así, el candidato de Navarra Suma a presidir el Gobierno foral, Javier Esparza, ha afirmado que las elecciones autonómicas solo dejan «dos opciones: Navarra Suma o todos, incluido Bildu, contra Navarra Suma», y «lo lógico» es que el candidato de la fuerza más votada se presente a la investidura.
Y ha añadido que es necesario «decir a la verdad» porque «la única alternativa para que no gobierne Navarra Suma es pactar con Bildu para que vote a favor o para que se abstenga (con el PSN) y su abstención nunca es gratis, jamás», por lo que ha señalado que tras una primera conversación con la socialista María Chivite su intención es seguir hablando «poco a poco» para buscar puntos de acuerdo en un programa político.
Chivite por su parte ha asegurado que cumplirá con su compromiso hacia la ciudadanía y trabajará para «construir un gobierno de progreso en Navarra».
Confirmado su ascenso electoral hasta la segunda posición, la candidata socialista a presidir el Gobierno foral dice que, doce años después, vuelven a tener «la oportunidad de liderar un ejecutivo progresista y de izquierdas que atienda las principales preocupaciones de la sociedad, que respete la pluralidad de esta tierra y que sea un gobierno para unir y apostar por la convivencia».
Por eso ha subrayado que no van a defraudar a «esos miles de navarros y navarras que han confiado en este partido» y que les han situado en «posición de liderar un gobierno social».
Por su parte, la permanente de Geroa Bai ha reiterado su emplazamiento al PSN a tomar la iniciativa para conformar un Gobierno «progresista y plural», al tiempo que ha lamentado no haber recibido todavía ninguna llamada de María Chivite para «estudiar la posibilidad de llegar a acuerdos».
En línea con lo ya expuesto anoche por Uxue Barkos, una vez comprobado que el cuatripartito había perdido la mayoría absoluta, la coalición entiende que corresponde a Chivite y al PSN tomar la iniciativa en las negociaciones, «tal y como han dejado claro los ciudadanos y ciudadanas en las urnas».
EH Bildu tiene previsto reunir a su dirección navarra en breve, pero hoy quien lo ha hecho ha sido la dirección nacional de la coalición abertzale y a la salida su coordinador general, Arnaldo Otegi, ha apuntado que los resultados electorales en Navarra reflejan que «la izquierda estatal se ha desinflado» y eso «pone en cuestión» el cambio.
En todo caso la candidata navarra, Bakartxo Ruiz, ha apostado por «hacer una análisis de la situación» entre las «fuerzas del cambio» para «ver qué posibilidades» existen de «seguir avanzando» en la «hoja de ruta» en la que han trabajado «en los últimos cuatro años».
También Podemos ha convocado a su dirección para las tres de la tarde pero sin embargo de momento no ha trascendido el análisis que le han merecido los resultados electorales de ayer, que le han supuesto bajar de 7 a 2 parlamentarios forales.
Desde el PP de Navarra, su presidenta, Ana Beltran, ha pedido «responsabilidad» al PSN para «cerrar» un ciclo político marcado por «las imposiciones del nacionalismo» y abrir otro en el que «prevalezca el constitucionalismo».
Mientras que Javier Horno, presidente y cabeza de lista Vox, que no ha logrado representación ninguna, ha reconocido el «batacazo» de su formación en la Comunidad Foral y lo ha atribuido al discurso del «voto útil» de los partidos mayoritarios. EFE
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