La propuesta de Ciudadanos de aumentar el porcentaje de voto para obtener escaño en el Congreso y Senado de este país, para aquellos partidos que sólo se presentan en alguna Comunidad Autónoma podría solucionar que los partidos nacionalistas dejen de influir en la política de este país.
Con todo no es una propuesta novedosa. Ya en el pasado algunos partidos la llevaron en sus programas electorales, pero, quizás, ahora, podría tener alguna posibilidad de salir adelante, dada la escandalosa actitud e influencia de este tipo de partidos. Y lo que es peor, su chulería y regodeo a la que últimamente nos tienen acostumbrados.
En su día se permitió a estos partidos que obtuvieran representación, para, con ello, conseguir unas mayorías, exiguas, pero suficientes para gobernar; pero he aquí, que ahora se han vuelto incómodos, ya que sus demandas superan con creces los límites tolerables y constitucionales.
Es por ello por lo que debería haber un compromiso entre los grandes partidos para suprimir está perniciosa influencia que tienen los nacionalismos en el presente de España.
Otro gallo cantaría.