El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha advertido este sábado de que el mayor problema de España en estos momentos es el PSOE y ha apelado a los votantes socialistas defraudados a sumarse a su partido, que «está mirando por encima de izquierdas y derechas»
«No les hacemos ningún tipo de reproche, el reproche se lo hacemos a sus dirigentes», ha asegurado Abascal, que por primera vez ha tendido la mano de forma clara, contundente y directa a los votantes socialistas para que «recorran el camino» con Vox.
Y lo ha hecho en un acto público en la plaza de toros La Cubierta, de la localidad madrileña de Leganés, que con una capacidad hábil de 9.200 plazas ha llenado 8.500, según fuentes del partido, que han sumado a otras 5.000 personas siguiendo el mitin en directo a través de las redes sociales.
El líder de Vox ha señalado al PSOE con el principal «enemigo» por pactar con quienes han apoyado el terrorismo, con los «golpistas» separatistas y con los «comunistas» que quieren llevar España a Venezuela.
«No demuestran el más mínimo amor al bien común y a la patria», ha dicho, al tiempo que se ha preguntado qué tiene el PSOE de obrero, «si se han olvidado de los obreros y los ven con desdén».
Por eso, ha animado a los votantes socialistas que habían confiado en las siglas del PSOE a sumarse a su proyecto. «Estamos aquí, contamos con ellos», ha afirmado.
Ha señalado también como «enemigo» al PP, que «no se atreve a dar las batallas comprometidas con sus votantes», así como a Ciudadanos, un «partido de diseño» que intenta «contentar» en función de las encuestas, mientras que sobre Podemos se ha limitado a señalar que «por suerte, están por los suelos».
Frente a toda esta «partitocracia inútil», el líder de Vox ha señalado la necesidad de que España recupere el protagonismo que, en su opinión, ha perdido durante los 40 años de democracia.
«Solo por España, los españoles y los intereses de nuestra nación», ha proclamado y ha subrayado que los candidatos de Vox a las generales del 28 de abril, que han sido presentados en el acto, concurren «no por una siglas verdes que son absolutamente prescindibles, sino por un sentimiento rojigualdo que es absolutamente irrenunciable».
Ha insistido en que en Vox están «mirando sobre todo para España» y, para ello, propone una «rebelión lo obvio» y el sentido común, cuyo triunfo, según ha dicho, es «inexorable».
«Adelante españoles, adelante compatriotas, sin miedo, por España. ¡Viva España!», ha concluido Abascal, a quien previamente el fundador del partido, José Antonio Ortega Lara, le ha asegurado la colaboración leal de quienes impulsaron el partido.
La presidenta de Vox Madrid, Rocío Monasterio, a la que definen en el partido como «el azote de los progres en televisión», ha incidido en que no se pueden arriesgar a «ir de la mano del PP, un partido «debilitado por la corrupción», que «abandonó su España y se fue a ahogar sus penas a un bar entregándola los enemigos».
Y frente a esa «derechita marchita», ha alabado a los candidatos de la «España silenciada» que harán «visible» a la «España real».
Como es habitual en los actos de Vox, han sonado el «Viva España», de Manolo Escobar, canciones de Ricky Martin o El Canto del Loco y el himno de la Legión, y se han intercalado vídeos de Abascal y los principales dirigentes del partido con otros en los que aparecían algunos políticos y periodistas.
Los aplausos a los primeros han sido unánimes, así como los abucheos y pitos a los segundos, especialmente contra Pedro Sánchez y Gabriel Rufián en este acto de Vox, que ha acabado con el himno de España y el lanzamiento de serpentinas rojas y amarillas. EFE