Rafael Nadal y Roger Federer frente a frente, por trigesimonovena ocasión y por primera vez en más de año y medio (Shanghái, 2017). El clásico que no cesa y que regresa en semifinales de Indian Wells, primer Masters 1000 de la temporada, con la incógnita del estado de la rodilla del español.
«Es un regalo poder competir a estas alturas de nuestras carreras», dijo Nadal a una pregunta de Efe. «Es bonito. Ojalá pueda estar preparado para competir como me gustaría competir», agregó.
El español lidera el registro de enfrentamientos directos con una marca de 23 victorias y 15 derrotas, si bien el suizo se ha impuesto en dos de los tres partidos que han disputado en el desierto californiano y en los últimos cinco que han jugado de forma global.
«No creo que importen mucho esos partidos, para ser honesto. Ha pasado mucho tiempo, desafortunadamente para nuestra rivalidad, o para mí», dijo Federer.