Fotografía de una moneda española de un Euro. EFE/Archivo
Solo el 12,89 % de los trabajadores autónomos que se han beneficiado entre 2013 y 2018 de la tarifa plana de 50 euros sigue dado de alta como trabajador por cuenta propia.
Los datos del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social muestran que en ese periodo el Régimen Especial de Autónomos (RETA) se ha incrementado en 211.815 afiliados medios, lo que supone el 12,89 % del total de beneficiarios de la tarifa plana, que ha sido de 1.643.084 personas.
“Existe una desproporción entre los beneficiarios de la tarifa plana y la evolución de los afiliados al RETA”, explica el Ministerio en un informe sobre la incidencia de esta bonificación.
La tarifa plana de 50 euros entró en vigor en febrero de 2013 con una duración de seis meses para los menores de 30 años que iniciasen su actividad por cuenta propia, si bien en septiembre de ese mismo año se quitó el límite de edad y en 2018 se amplió su duración a un año.
Sin embargo, el actual Gobierno de Pedro Sánchez aprobó vía decreto ley una subida pactada con las organizaciones de autónomos de 10 euros para 2019, hasta los 60 euros, a cambio de que sus beneficiarios tengan los mismos derechos y prestaciones que el resto de autónomos.
Los datos de Trabajo indican que el 60 % de los menores de 30 años que se dan de baja llevaba en alta poco más de un año, en tanto que los mayores de 30 años, aunque reducen ese porcentaje, también presentan un «alto porcentaje de cortas permanencias».
Concretamente, cuando se dan de baja los menores de 30 años llevaban afiliados al RETA una media de 426 días, mientras que los de 30 o más edad tenían un promedio de 1.226 días de alta.
Por comunidades autónomas, la incidencia de la tarifa plana en la evolución del régimen de autónomos «ha sido mínima» en regiones como el País Vasco y Castilla y León, donde el periodo analizado se ha saldado con una caída de la afiliación al RETA a pesar de los beneficiarios de la medida (61.941 en el País Vasco y 69.067 en Castilla y León).
Por el contrario, la ciudad autónoma de Melilla ha tenido la mayor incidencia, ya que se mantienen en el RETA el 35,38 % de los beneficiarios de la tarifa plana.
Le siguen Baleares, Canarias y Madrid, que han registrado porcentajes del 22,18, 21,94 y 20,06 %, respectivamente.
Las posiciones de las asociaciones de autónomos reflejan opiniones polarizadas sobre la eficacia de la tarifa plana y la regulación de la misma.
La vicepresidenta de la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA), Celia Ferrero, ha explicado a EFE que los cálculos que realiza el Ministerio son «incorrectos» y que la tarifa plana «ha demostrado que es una de las medidas que más empleo ha generado en España».
«Los incentivos al inicio de la puesta en marcha de un negocio existen en todos los países de la Unión Europea», ha insistido.
En contraposición, el presidente de UPTA, Eduardo Abad, ha advertido de que, a pesar de ser una buena medida para los autónomos que inician su actividad, su deficiente gestión está propiciando una «burbuja del emprendimiento», por lo que ha exigido un mayor control en la concesión de esta bonificación.
«Cuando se termina el periodo de la tarifa plana se incrementan los gastos estructurales y es cuando los negocios demuestran sus carencias», ha explicado al respecto.
Además, ha insistido en que es «inadmisible» que la tarifa se utilice como un elemento para que haya empresas que vulneren la legislación laboral con la contratación de falsos autónomos. EFE
Patricia Rivero
