El término «guerra sucia» hace referencia a cuando se emplea contra el otro todo tipo de mentiras, calumnias con el único de desprestigiarle. También ha tenido acepciones cuando dicho término se empleó para hablar de aquellos que buscaban a miembros de ETA. Se hablaba entonces de la «guerra sucia contra ETA».
Ayer el líder del PP, señor Casado, hablaba de guerra sucia contra su partido, cómo desde el partido socialista se ha dado la orden de atacar a su partido en un claro intento de «calumnia, que algo queda».
Y es que las elecciones del 28 de abril van a marcar un antes y un después en la política española. Es tan importante el resultado que, antes de que pase, si se puede hundir al enemigo, mejor que mejor.
Tras los resultados habrá que ver cual es la reacción de unos y de otros. Y quien sabe, quizá entonces nos encontremos ante una «guerra sucia».