El Ayuntamiento de Pamplona prevé cerrar 2018 con un 95% del presupuesto ejecutado, un superávit de 9,5 millones y una deuda consolidada de 63,5 millones, un 38 % menos que en 2014.
Así lo han apuntado en rueda de prensa la concejala delegada de Economía Local Sostenible, Patricia Perales, y el director de Hacienda, Comercio y Turismo, Gerardo Hurtado, informa el Consistorio.
Entre los datos aportados, figura la realización de un gasto de 202,34 millones tras ingresar 206,15 millones y el descenso de la deuda consolidada, de 102,1 millones en 2014 a 63,5 millones.
Del estado líquido de tesorería, han apuntado que refleja la solvencia financiera del sector público municipal, que se ha incrementado en un 61,8%, pasando de 29,1 millones que había en 2014 a 47,1 millones.
Han resaltado cuatro parámetros respecto a la gestión, entre ellos el saneamiento de las cuentas; el aumento de la capacidad de recaudación y la recuperación de la capacidad de gasto e inversión; la mejora de los servicios y del empleo público y la gestión manteniendo en lo posible el patrimonio.
Esto ha llevado a Perales a señalar que han sido «capaces de demostrar que existe otra forma de gestionar las cuentas públicas, saneándolas al tiempo que se defiende la inversión social y el empleo público”.
En cuanto a los ingresos, en comparación con el cierre de 2014, han aumentado un 9 %, al pasar de 188,93 millones a 206,15. Aproximadamente una cuarta parte los generan los impuestos directos, que incluyen la contribución territorial, plusvalía, impuesto de circulación o IAE, cuya recaudación ha aumentado un 10 % ha llegado a 55,73 millones.
Los impuestos indirectos, básicamente ICIO, han aumentado un 81 % y han alcanzado los 9,6 millones. Los ingresos por tasas y precios públicos han crecido un 10% .
Casi la mitad de los ingresos se deben a las transferencias corrientes, por las que se ingresaron 96,03 millones en 2014 por los 101,8 de 2018.
La enajenación de bienes, con la venta de terrenos y bienes propio, se ha incrementado en un 70%, con 5,38 millones en 2018, lo que eleva a 22,27 millones el valor de bienes vendidos en la legislatura, por debajo de la anterior en la que sumaron 29,93 millones.
Respecto a las transferencias de capital derivadas de la financiación de administraciones de fuera de Navarra (Estado y UE, principalmente) han caído un 84 %, pasando de 2,62 millones en 2014 a 0,41 en 2018 por el final de las inversiones estatales derivadas del Plan E y la restricción en el capítulo de ayudas europeas.
En cuanto a los gastos, la mayor partida se destina a personal, 86 millones que suponen un aumento del 15 %. Esto se debe, principalmente, a las subidas salariales, al pago de las pagas extras que se adeudaba y a la remunicipalización de servicios antes externalizados.
El principal incremento en los gastos tienen que ver con las inversiones que han crecido un 183 %, con 13,3 millones de euros. Descienden las transferencias de capital un 70% y se sitúan en 2,06 millones, ya que se transfiere menos dinero a Gerencia de Urbanismo para la realización de sus planes y proyectos. Sumando ambos capítulos, el gasto asciende en 2014 a 11,53 millones y en 2018 a 15,36.
El gasto corriente también ha aumentado un 14%, con 71,7 millones y los gastos financieros y las transferencias corrientes han descendido un 67 % y un 7%, respectivamente, por cuestiones como la reducción de la deuda y los intereses que se pagan por ella.
La amortización de préstamos se ha incrementado en un 9%, llegando a 7,1 millones, según los datos aportados que recogen que no se ha consignado ni un euro a la solicitud de préstamos y que la valoración del rating de la agencia de calificación Fitch ha mejorado la situación del Ayuntamiento pasando de ‘BBB’ en 2014 a ‘A-‘ en 2018, dos peldaños que «muestran una mejor perspectiva económica y crediticia». EFE