Ayer, tras la votación de rechazo al acuerdo del Brexit llevado a cabo en el Parlamento británico, quedó demostrado que la política de aislamiento que el Reino Unido ha iniciado desde ya algunos años, no puede considerarse buena.
Ni es buena para unos políticos ingleses, empeñados en demostrar que su país es diferente al resto de Europa, ni es buena para unos ciudadanos que empiezan a estar hartos de un proceso que les puede privar de unos derechos que no van a tener si abandonan la Unión Europea.
Y es que, el que fue primer ministro británico, señor Cameron, metió en un lío a su país, al fomentar un referéndum que lo ha situado en el ojo del huracán.
A veces, no vale sentirse superior a los demás porque pasa lo que pasa y cuando se cae, se cae fuerte. Y ahí es donde está ahora el Reino Unido, en el.hoyo más profundo